domingo, 8 de marzo de 2009

DIALOGANDO CON LOS TTJJ.

REVISE LA BIBLIA
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Dialogando con Los Testigos de Jehová

¿Recuerda la última vez que le visitaron los Testigos de Jehová? Estas personas parecen tener una respuesta para todo. La verdad es que ellos están preparados para contestar muchas preguntas u objeciones que se les presente durante su exposición. Entonces, ¿cuál sería la mejor manera de testificarles? Haciéndoles preguntas que no están preparados para contestar. Esto causará que el Testigo de Jehová piense por sí mismo.
Los Testigos de Jehová creen que Jesucristo resucitó como espíritu, no en su propio cuerpo. Dígales, "Si Jesús resucitó como un espíritu, entonces ¿que pasó con su cuerpo?" Si le contestan que Jehová lo desapareció en gases, pida que le muestren eso en la Biblia. Ahora, si Jesús fue resucitado como espíritu y sólo se materializó en diferentes cuerpos (como ellos afirman), no hubiera habido necesidad de “velar” los ojos de los discípulos en el camino de Emaús para que no le conocieran Lc. 24:16, 31 Mas los ojos de ellos estaban velados, para que no le conociesen. Y les dijo: ¿Qué pláticas son estas que tenéis entre vosotros mientras camináis, y por qué estáis tristes? Respondiendo uno de ellos, que se llamaba Cleofas, le dijo: ¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no has sabido las cosas que en ella han acontecido en estos días? Entonces él les dijo: ¿Qué cosas? Y ellos le dijeron: De Jesús nazareno, que fue varón profeta, poderoso en obra y en palabra delante de Dios y de todo el pueblo; y cómo le entregaron los principales sacerdotes y nuestros gobernantes a sentencia de muerte, y le crucificaron. Pero nosotros esperábamos que él era el que había de redimir a Israel; y ahora, además de todo esto, hoy es ya el tercer día que esto ha acontecido. Aunque también nos han asombrado unas mujeres de entre nosotros, las que antes del día fueron al sepulcro; y como no hallaron su cuerpo, vinieron diciendo que también habían visto visión de ángeles, quienes dijeron que él vive. Y fueron algunos de los nuestros al sepulcro, y hallaron así como las mujeres habían dicho, pero a él no le vieron. Entonces él les dijo: !! Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho! ¿No era necesario que el Cristo padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria? Y comenzando desde Moisés, y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de él decían. Llegaron a la aldea adonde iban, y él hizo como que iba más lejos. Mas ellos le obligaron a quedarse, diciendo: Quédate con nosotros, porque se hace tarde, y el día ya ha declinado. Entró, pues, a quedarse con ellos. Y aconteció que estando sentado con ellos a la mesa, tomó el pan y lo bendijo, lo partió, y les dio. Entonces les fueron abiertos los ojos, y le reconocieron; mas él se desapareció de su vista.
Pregúnteles: ¿Cuál es el evangelio que ustedes predican de casa en casa? Los cristianos predicamos la muerte, sepultura, y resurrección de Jesucristo, ya que el apóstol Pablo nos dice que éste es el evangelio por el cual somos salvos 1 Cor. 15:1-4. Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras ¿Es éste el mismo evangelio que los Testigos de Jehová predican? Gálatas 1:8 y 9 Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.
La Atalaya del 1 de abril de 1979, página 31, dice que Jesucristo es solamente el mediador de los 144.000 cristianos "ungidos". Pregúnteles: ¿Es usted parte de los 144.000? La respuesta normalmente será ¡no! Entonces dígales: "¿Quién es su mediador?" Puesto que la teología de la Sociedad Watchtower limita el nuevo pacto a 144.000 personas, esto significa que el resto de los Testigos de Jehová están bajo el antiguo pacto (la ley del pecado y la muerte). A los Testigos que no son parte de los 144.000 no se les permite participar en la Cena del Señor. Pregúnteles: ¿No dijo Jesús que a menos que coman de su cuerpo y tomen de su sangre no heredarán la vida eterna? Jn. 6:53-59 Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero. Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre, en mí permanece, y yo en él. Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí. Este es el pan que descendió del cielo; no como vuestros padres comieron el maná, y murieron; el que come de este pan, vivirá eternamente. Estas cosas dijo en la sinagoga, enseñando en Capernaum.

Ellos también creen que Jesucristo regresó invisiblemente en 1914; les puede preguntar: ¿Por qué es que siguen observando la Cena del Señor, puesto que según 1 Corintios 11:26 Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga? Estos son sólo algunos puntos que usted podrá presentar al Testigo de Jehová y quizás lo hagan dudar sobre sus creencias. La Biblia nos dice que debemos “estar preparados 1 Ped.3:15 sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros. También nos dice que nuestro deber es el de “predicar el evangelio a toda criatura” Mar. 16:15Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura, debemos plantar la semilla en los corazones, pero el Espíritu Santo es el que da el crecimiento.
DIOS TE BENDIGA MI HERMANO(A)

martes, 3 de marzo de 2009

EVANGELISMO PARA TODOS, CRECIENDO A GRANDES PASOS

REVISE LA BIBLIA

“Y lo que has oído de mi en la presencia de muchos testigos, eso encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros” (2 Timoteo 2:2).

Creciendo A Grandes Pasos

Cualquier estudiante de la Biblia puede darse cuenta como la Iglesia del primer siglo crecía a grandes pasos. El crecimiento que ellos experimentaban no estaba basado en miembros cambiándose de una congregación a otra. Tampoco crecían a grandes pasos porque las hermanas de la Iglesia daban a luz a muchos bebes, y de esta manera la asistencia aumentaba. Este no fue el caso. La Biblia revela claramente las razones por las cuales la Iglesia de Cristo crecía a grandes pasos. Por medio de este articulo deseo proveer información sobre el crecimiento numérico de la Iglesia del primer siglo.

Los siguientes pasajes muestran el crecimiento asombroso de la iglesia del primer siglo (Hch. 2:41; 4:4; 5:14, 38; 6:7; 8:12; 9:32-35, 42; 11:21, 24; 12:24; 14:1; 16:5; 17:6; 19:20; Ro. 15:19). Le animo en el nombre del Señor que tome tiempo para leer estos pasajes muy importantes. “Iglesia de Cristo se fiel al Señor id por todo el mundo es la comisión, conduce a las almas al buen Salvador, todo el que creyere tendrá salvación” Usted y yo probablemente nos preguntemos porque fue que ellos crecieron de esta manera. Bueno, creo que la respuesta la encontramos en las Sagradas Escrituras.


Observemos los siguientes puntos.

La Iglesia del primer siglo creció por las siguientes razones:

1. Tomaron en serio la gran comisión (Mr. 16:15-16; Mateo 28:18-20)
2. Amaban a Dios de todo corazón (Mr. 12:30; Juan 14:15)
3. Practicaban el evangelismo personal todos los días (Hch. 8:1-4; 1 Ts. 1:7-8; Col. 1:5-6)
4. Estaban dispuestos a sufrir por Cristo (Hch. 8:4; Hch. 21:13)
5. Ponían a Dios en primer lugar (Mt. 6:33; Col. 3:1-4)
6. Reconocieron que el evangelio era, y sigue siendo el poder de Dios para salvación (Ro. 1:14-16)
7. Tenían compasión por las almas perdidas (Mt. 9:36- 38)
8. Tenían amor por el prójimo (Mr. 12:31)
9. Oraban por aquellos que predicaban el evangelio (Ef. 6:18-19)
10. Querían ir al cielo (Mt. 7:21)

Si hoy en día deseamos crecer a grandes pasos, usted y yo necesitamos tomar en serio la gran comisión que nuestro Señor Jesucristo nos ha dejado para obedecer.
El crecimiento del primer siglo puede ser observado hoy en día si tan solamente hacemos lo que los cristianos del primer siglo hicieron — id por todo el mundo con el mensaje de salvación (Mr. 16:15). Espero en Dios que usted y yo estemos dispuestos a obedecer la gran comisión para que la Iglesia también crezca a grandes pasos. Que el Dios del cielo nos ayude a poder llevar a cabo Su voluntad, de otra manera, nuestra salvación estará en peligro.
“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado será salvo mas el que no creyere será condenado”--Marcos 16:15-16

El evangelismo mundial nunca se lograra si el evangelizado no se convierte en un evangelista

Soy Deudor a Todos

Nuestro Señor Jesucristo enseña a sus apóstoles la importancia y el método de predicar el Evangelio (Mateo 28:18-20; Marcos 16:15). A este proceso, nosotros le llamamos evangelismo Personal. La palabra ¨evangelismo¨ significa lo que es relativo con el evangelio. Las escrituras nos enseña que el evangelio es la enseñanza de la vida, muerte, sepultura, y resurrección de nuestro Señor Jesucristo (1 Corintios 15:1-4).
Además, la palabra ¨personal¨ significa que la enseñanza del evangelio debe ser individualmente. Cada Cristiano tiene la responsabilidad de predicar el evangelio a toda persona que se encuentra alejado de Dios (Efesios 2:12). Pablo lo poner de esta manera, ¨A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabio soy deudor. Así que, en cuanto a mí,pronto estoy para anunciar el evangelio también a vosotros que están en Roma¨ (Romanos 1:14-15). Así que, los apóstoles recibieron el mandamiento de predicar el evangelio a todo el mundo(Marcos 16:15). Ellos también enseñaron este mandamiento a la iglesia de Cristo cuando se estableció en el día de Pentecostés, y la iglesia persevera en dicho mandamiento (Hechos 2:42). Esto es obvio por la manera en como la iglesia del primero siglo creció en número (Hechos 2:41; 4:4; 5:14; 6:7). Este mandamiento debe de prevalece en las iglesias de Cristo de hoy día por que sigue siguiendo un mandamiento para nosotros también(Efesios 3:11; 1 Pedro 2:9).
Cristo también enseña a sus apóstoles la manera de hacer esta obra. Cristo simplemente les enseño a sus apóstoles que ellos deberían de ¨id . . . a todas las naciones (Mateo 28:19). Esta practica se ve en la ciudad de Jerusalén, en todo Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra¨ (Hechos 1:8). En Jerusalén, los apóstoles y miembros de la iglesia de Cristo, predicaron las buena nuevas de Cristo (Hechos 5:28). Ellos no esperaban que la gente viniera a ellos, sino que ellos fueron a la gente para predicarles el evangelio. Ellos fueron casa por casa, y en el templo, para predicar el evangelio (Hechos 2:46; 5:42). Cuando llega la gran persecución a la iglesia de Cristo, algunos Cristianos que vivían en la ciudad de Jerusalén fueron esparcidos por las tierras de Judea, Samaria, y hasta lo último de la tierra (Hechos 8:1; 1 Pedro 1:1). Entre ellos encontramos a Felipe (Hechos 6:5; cf. 8:12).



Felipe fue a la región de Samaria para predicar el evangelio a la gente que estaba alejada de Dios (Hechos8:12). Otros Cristianos, que habían salido de Jerusalén, también predicaron el evangelismo personal en Fenicia, Chipre, y Antioquía (Hechos 11:19). Pablo fue el escogido por el Espíritu Santo para ir hasta lo último de la tierra para predicar el evangelio (Colosenses 1:23). Esta obra la podemos leer en el libro de la historia de la iglesia, Hechos 13:1 - 21:17. En todos estos ejemplos vemos la manera en como los apóstoles, y los Cristianos, hicieron esta obra. Ellos fueron a las personas alejadas de Dios y les predicaron el evangelio. Algunas iglesias de Cristo de hoy día, carecen de poner en practica este método de evangelismo personal. Carecen del deseo de querer id a las personas alejados de Dios. Muchas almas tiene sed del Dios vivo, pero ¨a la
verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies que envíe obreros a su mies¨ (Salmos 42:2; Mateo 9:37-38).

Una Triste Realidad

“El cristiano promedio de la Iglesia de Cristo ha escuchado 4,000 predicas, cantado 20,000
himnos, participado en 8,000 oraciones publicas… Y convertido cero pecadores. Que tan cercano esta usted a este promedio?
¿Porque Predicar El Evangelio?

Decepcionantemente, muchos cristianos aun hacen la pregunta: “¿Por qué debemos evangelizar?” No importa el número de sermones acerca del evangelismo que ellos hayan escuchado a lo largo de su vida, ellos aun continúan preguntando “¿Por qué debemos evangelizar?” Por lo tanto, el propósito de este breve artículo es contestar esta pregunta dando cuatro razones por las cuales usted y yo debemos evangelizar.
Considere lo siguiente: ¿Por qué debemos evangelizar?



Primeramente, debemos evangelizar porque Es un mandamiento de nuestro Señor Jesucristo. Cuando nosotros leemos la Biblia podemos darnos cuenta que Jesucristo, antes de ascender a los cielos, nos dejó un mandamiento que comúnmente conocemos como “La Gran Comisión.” Esta “Gran Comisión” se encuentra en Mateo 28:18-20; Lucas 24:45-47 y Marcos 16:15-16. Entonces, como podemos observar, Jesús dejó un mandamiento y nuestro deber como Sus seguidores es cumplir ese mandamiento (Juan 14:15; 12:48; Cf. Santiago 1:22).
En segundo lugar, debemos evangelizar no solamente porque es un mandamiento de nuestro Señor Jesucristo, sino porque Jesús nos dio el ejemplo. Jesús vino a este mundo a buscar y a salvar lo que se había perdido (Lucas 19:10). Jesús siempre se enfocó en evangelizar a las multitudes (Mateo 5- 7) y no solamente eso, sino también se enfocó en evangelizar a varias personas a un nivel individual (Juan 3:1-13; 4:1-26;etc.); haciendo eso fue como nuestro Señor Jesucristo pudo impactar la vida del mundo entero. Por lo tanto, es nuestro deber como cristianos seguir Su ejemplo (I Pedro 2:21).
En tercer lugar, debemos evangelizar porque los cristianos del primer siglo lo hicieron. La razón primordial por la cual la iglesia del primer siglo crecía fue porque sus miembros evangelizaban.
Cuando leemos la Biblia podemos darnos cuenta que ellos evangelizaban:
1) a pesar de la persecución (Hechos 8:1-4),
2) a pesar de la oposición (Hechos 5:28-29) y lo mas importante
3) ellos evangelizaban predicando “todo el consejo de Dios,” (Hechos 20:20-27).
Por lo tanto, si nosotros seguimos su ejemplo, entonces nosotros también creceremos como ellos lo hicieron (Hechos 2:41-47).
El plan de Dios para perpetuar la verdad es, “enseñar a otros, para que otros enseñen a otros” y así la verdad pueda continuar existiendo de generación en generación (Cf. II Timoteo 2:1-2). Y, en cuarto lugar, debemos evangelizar porque el evangelismo es el trabajo que mejor paga tiene. ¡Sí! Como usted lo leyó – el evangelismo es el trabajo que mejor paga tiene. Y la razón es porque nuestro pago, si somos activos en evangelizar, será gozar de vida eterna con nuestro Señor Jesucristo (Mateo 25:19-23; Cf. I Corintios 15:58). Por lo tanto, si queremos gozar de vida eterna debemos “trabajar;” de lo contrario seremos echados a las tinieblas, donde será el llanto y crujir de dientes (Mateo 25:30). La pregunta es: “¿Quiere usted ser recompensado cuando Cristo venga a saldar cuentas con nosotros?” o “¿Quiere usted ser avergonzado-
Conclusión.

Las razones que pudiésemos dar para contestar la pregunta“¿Por qué debemos evangelizar?” son innumerables; pero espero que con estas cuatro razones, todos nosotros podamos tomar conciencia y examinarnos para saber si estamos en la fe (II Corintios 13:5) y para saber si estamos amando a Cristo de hecho y en verdad, o nada mas de palabra y de lengua (I Juan 3:18; 5:2; Juan 14:15).




Los Incrédulos — ¿Están Realmente Perdidos?

Recientemente, escuché a un predicador afirmar que si los Cristianos realmente creyéramos que los incrédulos están perdidos, haríamos mucho mas esfuerzo para esparcir el evangelio. El análisis de este preocupado predicador refleja la realidad que los Cristianos del siglo XXI estamos perdiendo el celo por la evangelización. Sin duda alguna, muchos son los factores que han contribuido a esta infortunada situación. No obstante, uno los factores de más significativos es que el Cristiano ha cesado de creer que los incrédulos están en un estado de perdición. Contrario a esta noción, la Biblia enfáticamente enseña que los incrédulos están perdidos por las siguientes razones:

Los Incrédulos están Cegados por Satanás.
El apóstol Pablo afirmó que los incrédulos están en la oscuridad y el dominio de Satanás (Hch. 26:18). Y aseguró que, “el dios de este mundo ha cegado el entendimiento de los incrédulos, para que no vean el resplandor del evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios” (2 Co. 4:4). Los Incrédulos no han Creído en Cristo. Jesús advirtió: “Por eso os dije que moriréis en vuestros pecados; porque si no creéis que yo soy, moriréis en vuestros pecados” (Jn. 8:24). Sin embargo, creer en Cristo no solamente significa decir “yo creo en Jesús”, sino una convicción que lleva a obedecer su voluntad. Jesús dijo: “No todo el que me dice: ‘Señor, Señor’, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mt. 7:21). Ninguna persona puede afirmar creer en Cristo y vivir una vida en el pecado. Los Incrédulos no se han Arrepentido de sus Pecados. Nuestro Señor Jesucristo dió a conocer las consecuencias de no arrepentirse cuando dijo: “si no os arrepentís, moriréis en vuestros pecados” (Lc. 13:3,5). Arrepentirse significa cambiar de mente y de estilo de vida. Un ejemplo de ello lo vemos ilustrado en la vida de Zaqueo. Este hombre expresó su arrepentimiento diciendo: “He aquí, Señor, la mitad de mis bienes daré a los pobres, y si en algo he defraudado a alguno, se lo restituiré cuadruplicado” (Lc. 19:8). A estas palabras Jesús contestó con aprobación “Hoy la salvación ha llegado a esta casa”, y declaró: “porque el Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo que se había perdido” (Lc. 19:10). Jesús afirmó que vino a “buscar y a salvar lo que se había perdido”, lo cual indica, que Zaqueo antes de su arrepentimiento estaba en un estado de perdición. Pablo, escribiendo a los Romanos advierte apasionadamente: “Mas por causa de tu terquedad y de tu corazón no arrepentido, estás acumulando ira para ti en el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios” (Ro. 2:5).

Los Incrédulos no han Confesado a Jesús como Señor.

El apóstol Pablo escribiendo a los Romanos escribió: “si confiesas (cláusula condicional) con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios le resucitó de entre los muertos, serás salvo; porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación
(Ro. 10:9-10).
Una persona que no ha confesado a Cristo como Señor esta en perdición. La oferta de recibir la salvación al confesar a Cristo presupone que la persona esta en un estado de perdición. Los Incrédulos no han sido Bautizados. Lucas, inspirado por el Espíritu Santo nos dice que en el día del Pentecostés “los que habían recibido su palabra fueron bautizados” (Hch. 2:41). De acuerdo a este versículo, un requisito preparatorio para el bautismo es recibir la palabra de Dios.
Recibir la palabra indica obediencia a las estipulaciones divinas para recibir la salvación, i.e., oír el evangelio, creer en Cristo, arrepentirse de sus pecados, confesar a Cristo y posteriormente ser bautizado. Una persona que no recibe la palabra no puede ser bautizada. Por consiguiente una persona que no ha sido bautizada conforme al patrón delineado por el Nuevo Testamento esta perdida porque: a) el bautismo nos salva (1 P. 3:21). b) el bautismo nos reviste de Cristo (Ga. 3:27). c) El bautismo nos pone en Cristo donde esta toda bendición espiritual (Ef. 1:3). Fuera de Cristo estamos perdidos.

Los Incrédulos no han sido Perdonados de sus Pecados. El Señor Jesús dijo: “porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que es derramada por muchos para el perdón de los pecados” (Mt 26:28). El Apóstol Pablo corroborando las palabras del Maestro dijo: “En El tenemos redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados según las riquezas de su gracia” (Ef. 1:7). Sin embargo, el apóstol Pedro enseñó que existen ciertos pasos para recibir este perdón de pecados. El mismo hablando a un grupo de Judíos arrepentidos dijo: “Arrepentíos y sed bautizados cada uno de vosotros para el perdón de los pecados”(Hch. 2:38). Una persona que no se ha arrepentido ni ha sido bautizada bíblicamente, no ha sido perdonada de sus pecados, consecuentemente, está en perdición.

Los Incrédulos no han sido Añadidos a la Iglesia.

Ser parte del cuerpo de Cristo, es decir la Iglesia, es esencial para ser salvo. El apóstol Pablo dice que Cristo es el “Salvador del cuerpo” (Ef. 5:23). Cristo no puede salvar a una persona que no es parte de su cuerpo. Lucas, nos relata que el día del Pentecostés, “los que habían recibido su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil almas” (Hch. 2:41). Además, escribió: “Y el Señor añadía cada día al número de ellos los que iban siendo salvos” (Hch. 2:47). Este grupo de personas que recibían la palabra y eran bautizados, recibían la bendición de ser añadidos a la Iglesia. Esta bendición es exclusivamente para los que obedecen el evangelio de Cristo. ¿Verdaderamente cree usted que una persona que no es Cristiana esta perdida? El tiempo es ya, que el pueblo de Dios se dé cuenta que la mayoría del mundo está en perdición.
Una vez que nos hayamos convencido de ello, entonces, y solamente entonces, tomaremos en serio el trabajo de la evangelización.

Requisitos Para Ser Un Evangelista

En primer lugar, deseo poner en claro a que me refiero cuando hablo de un “evangelista”. Cuando hablo de un evangelista no me estoy refiriendo necesariamente a un predicador que ha estudiado para poder estar al frente de una obra y predicar en una capacidad de tiempo completo. Cuando hablo de un evangelista, es decir, en el sentido en el cual lo empleo en este articulo me estoy refiriendo a toda persona que practica el evangelismo personal, es decir, una persona que lleva las buenas nuevas de salvación a los perdidos de este mundo.

Habiendo aclarado este punto, ahora deseo observar cuales son los requisitos que un evangelista necesita tener para poder tener éxito en el area del evangelismo personal. Le animo en el nombre del Señor a que considere cuidadosamente estos requisitos para que los ponga en
practica, y de esta manera, traer honra y gloria a nuestro Padre celestial.

Requisitos que un evangelista debe tener:

1. Debe estar dispuesto a sufrir por Cristo (2 Ti. 3:12; Hch. 5:41; Hch. 14)
2. Debe conocer las Escrituras muy bien, es decir, el plan de salvación, y temas relacionados a la salvación del hombre (2 P. 3:18; 1 P. 3:15)
3. Debe aprovechar cada oportunidad para compartir el evangelio de Cristo
(Hch. 8:4; Hch. 10:24)
4. Debe tener mucha sabiduría y tacto para hablar con las personas. El no tener este requisito puede traer serias consecuencias.
5. Debe tener mucha compasión por los perdidos (Mt. 9:36-38; Ro. 10:1-2)
6. Debe tener mucho amor por nuestro Señor Jesucristo (Jn. 14:15)
7. Debe estar dispuesto a imitar a nuestro Señor Jesucristo (1 P. 2:21; 1 Co. 11:1; Lc. 19:10)
8. Debe estar preparado para responder preguntas que
los prospectos le puedan hacer (1 P. 3:15)
9. Debe ser una persona de oración (1 Ts. 5:17; Col. 4:2)
10. Debe amar a su prójimo como a si mismo (Mr. 12:31)

¿Están estos requisitos en usted? ¿Es usted un evangelista como Dios quiere? Es mi oración el que usted posea estos requisitos para que la Iglesia del Señor crezca como Dios lo desea.

Acróstico de un Evangelista:

Un evangelista es uno que…

Evita el pecado para no ser tropiezo a la predicación del evangelio
Va en pos de los perdidos para traerlos a Cristo
Ama a su prójimo como a si mismo
Niega el rechazo de oportunidades para predicar el evangelio
Gasta su tiempo buscando al perdido
Estudia su Biblia para estar siempre preparado
Levanta en alto la Gran Comisión dada por el Señor Jesucristo
Imita a Jesús, el mejor evangelista que Dios ha tenido
Siembra la semilla del evangelio de Cristo
Trata de motivar a otros para que se conviertan en evangelistas
Advierte sobre las consecuencias de no practicar el evangelismo personal


Actitudes Correctas Hacia La Practica del Evangelismo Personal

Se ha preguntado usted alguna ves, ¿Cuál es mi responsabilidad y respuesta al evangelismo personal?, ¿Con cuanta seriedad he tomado el mandamiento de ir y predicar el evangelio a toda criatura? (Mr. 16:15), la gran comisión es para todos (Mt. 28:19).

Los primeros cristianos tomaron una correcta actitud. Los discípulos lo tomaron muy en serio y lo predicaban por todas las aldeas (Lc. 9:6), aun los que perseguían la iglesia como Saulo de Tarso, también lo tomaron en serio persiguiéndoles casa por casa a los evangelizados (cristianos) (Hch. 8:1-3), también los cristianos del primer siglo fueron consientes al respecto; tales como Esteban quien murió apedreado predicando con gran valor y denuedo (Hch. 7:59-60), así también Felipe, y muchos otros los cuales también evangelizaban por todas partes bajo fuerte persecución (Hch.8:4), posteriormente también el mismo Saulo, después de convertido y conocido como el apóstol Pablo, lo hizo a manera de decir “de manera que desde Jerusalén, y por los alrededores hasta Ilírico, he llenado todo del evangelio de Cristo” (Ro. 15:19). Así que
los resultados fueron grandes, tal como lo fue en el día del Pentecostés cuando se bautizaron como tres mil personas (Hch. 2:41), este fue el resultado por la sencilla razón de que perseveraban unánimes en la doctrina de los apóstoles, a manera que la gente a su alrededor admiraba la unidad y amor entre ellos (Hch. 2:46-47), lo cual también debemos de mostrar hoy en día en la iglesia y en nuestra comunidad. La unidad es importantísima especialmente en la obra de la evangelización. Toda esta gente había entendido y comprendido lo que Jesús había dicho antes de ir a Jerusalén para así padecer, y finalmente encontrarse con la muerte, mas aun posteriormente absorber la muerte en victoria (Mt. 16:21; 1 Co. 15:1-4), diciendo, “Porque
¿de qué aprovecha al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma? O ¿qué recompensa dará el hombre por su alma?” (Mt. 16:26).

El Padre y el Hijo tienen una perfecta actitud. En primer lugar, recordemos algunos aspectos que se envuelven en el evangelio, por ejemplo; en cuanto como fue que aun nuestro Padre celestial mostró su amor dando a su Hijo unigénito (Jn. 3:16), y nos da vida en el (1Jn. 4:9; 5:11), así como, mismo Cristo Jesús nuestro salvador a dado a conocer su actitud en cuanto a predicar el evangelio a las almas perdidas dando su vida en rescate por nosotros (Mr. 20:28; Jn. 15:13; Ro. 5:8). Evangelizar debe de ser parte de nuestra vida. Esto es lo que el Padre y el Hijo han hecho por nosotros, pero sin embargo no nos dejan sin responsabilidad en este trabajo, en el cual nosotros también debemos de poner la vida por los demás (1Jn. 3:16; 4:11). A la vez debemos de recordar que es necesario hacer la voluntad de nuestro Padre celestial, para poder tener lugar en las moradas celestiales, no sea que se nos niegue la entrada al cielo en el día postrero
(Mt. 7:21-23).

El lugar ya esta preparado para que aquellos que le obedezcamos, estaremos con el por la eternidad (Jn. 14:1-6), recibiendo estas bendiciones las cuales se encuentran en Cristo
(Ef. 1:3-5).

La necesidad de predicar el evangelio se ha ido acrecentando día con día, ya que no son muchos los que lo practican, Jesús mismo lo declaro así, “Y les decía: La mies á la verdad es mucha, mas los obreros pocos; por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe obreros á su mies” (Lc. 10:2). Nosotros debemos de tener la correcta actitud también. El apóstol Pablo lo declara de manera simple y sencilla para cada uno de nosotros, al decir, “Porque si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio!” (1 Co. 9:16). En palabras mas claras “Pobres de nosotros si no predicamos el evangelio.” La necesidad primordial del cristiano debe ser el llevar el evangelio a las almas perdidas a diario, y trabajar arduamente por ello. Por lo tanto debemos de estar preparados para ello (2 Ti.2:15; 1 Pe.3:15). Así mismo debemos predicarlo sin vergüenza alguna, porque es el poder de Dios para salvación (Ro. 1:16). De la misma manera debemos de tener cuidado de nosotros mismo y de nuestra salvación al predicar el evangelio (2 Ti.4:16). Todo esto puede ser posible, “Porque no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.” (2 Ti.1:7). Que Dios nos ayude en llevar el evangelio a todo el mundo, y “No nos cansemos, pues, de hacer bien; que á su tiempo segaremos, si no hubiéremos desmayado”
(Ga. 6:9).

Nuestra Misión

El Evangelio de Cristo por doquiera llevar; Y de esta manera las almas perdidas salvar.

La Gran Comisión a la Iglesia fue dada; Para que sea cumplida y no ignorada.

El mundo entero se encuentra bajo el maligno; Y continuara asi, si no practicamos el evangelismo.

Asi que hermanos, el Evangelio proclamemos;
Para que multitudes obedientes al cielo guiemos.

Recordando Quienes Somos

La persona que ha nacido de nuevo por medio de la obediencia al evangelio de Cristo necesita recordar quien es delante de Dios. La Biblia nos enseña quienes somos y cual es nuestra responsabilidad delante de nuestro Padre Celestial. Por medio de este pequeño articulo observemos lo que la Biblia nos enseña en cuanto a quienes somos. A la misma vez, le animo en el nombre del Señor a que considere cuidadosamente esta información para que la ponga en practica. Según la Biblia usted y yo somos…
Pescadores de Hombres (Mr. 1:17; Mt. 4:19; Lc. 5:10).
Embajadores de Cristo (2 Co. 5:20)
Ministros de la reconciliación (2 Co. 5:18-20)
Colaboradores con Dios (1 Co. 3:9)
Sembradores de la Palabra de Dios (Mr. 4:14)
La luz del mundo y la sal de la tierra (Mt. 5:13-16)
Columna y baluarte de la verdad (1 Ti. 3:15)
Siervos de Cristo (Lc. 17:10) Evangelistas, es decir, miembros que llevan las buenas nuevas de salvación (Mr. 16:15; Mt. 28:18-20)

De acuerdo a las Escrituras, esto es lo que somos. Para poder tener éxito en el evangelismo personal necesitamos recordar estas cosas. El no recordar estas cosas traerá serias consecuencias.Es importante que reconozcamos que Dios no nos ha puesto en este mundo para que busquemos la fama, las riquezas o cualquier otra cosas. Dios nos ha puesto en este mundo para que hagamos Su voluntad. Dios desea que recordemos quienes somos, ya que, recordando quienes somos nos ayudara a poder buscar al perdido y poner en practica nuestra misión que el Señor nos ha dado. Que el Dios del cielo nos ayude a poder tener estas cosas en mente. Nuestro Dios necesita nuestra ayuda para cumplir con una de las misiones mas importantes de este siglo Ganar almas para Cristo. A Dios sea siempre la honra y la gloria en todo lo que hagamos para El.

Temas Que El Cristiano Debe Estudiar Para Anunciar Las Buenas Nuevas

La Palabra de Dios nos exhorta a estar siempre preparados para presentar respuesta de nuestra esperanza (1P. 3:15). También nos exhorta a crecer en la gracia y en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo (2 P. 3:18). Dado a que este es el caso, es imperativo que el cristiano
sea un estudiante diligente de la Biblia para que pueda compartir las buenas nuevas de salvación de una manera eficaz. Asi que, con esto en mente, observe una lista de temas bíblicos que el cristiano debe tener en mente para poder practicar 1 Pedro 3:15, y de esta manera
estar siempre preparado para dar una respuesta bíblica.

Temas que el cristiano debe estudiar y conocer muy bien:
1. El plan de Salvación.
2. La diferencia entre el Antiguo y el Nuevo Testamento.
3. La realidad del cielo.
4. La realidad del infierno.
5. La Iglesia del Nuevo Testamento: Su establecimiento, su misión, su nombre, etc.
6. La importancia del arrepentimiento.
7. Que hacer y que no hacer durante un estudio con una persona inconversa.
8. Como hablarle a las personas del Evangelio.
9. Lo que es el Evangelio.
10. La realidad del pecado.
11. La autoridad de las Sagradas Escrituras.
12. La existencia de Dios.
13. La inspiración de las Escrituras.
14. Información general sobre varias denominaciones y porque tales no son autorizadas por Dios.
15. La Deidad de Cristo.
16. El Espíritu Santo.
17. Ejemplos de conversión.

Estos son solo algunos de los temas que el cristiano debe conocer para poder estudiar el Evangelio con cualquier persona que tenga el deseo de estudiar la Biblia. Le animo a que sea un estudiante diligente de las Escrituras. Esto le ayudara a poder estar siempre preparado. No solamente estará preparado, sino que también tendrá mucha confianza de saber que usted podrá responder a cualquier pregunta que le puedan hacer. ¿Esta usted familiarizado con estos temas
bíblicos?

Porque Muchos No Practican El Evangelismo Personal

Muchas son las razones por las cuales muchos
miembros del cuerpo de Cristo no practican el evangelismo
personal. Observemos algunas de estas razones.
Muchos no quieren hacer tiempo para envolverse
en esta obra de suma importancia.
1. Muchos tienen miedo al rechazo.
2. Muchos no saben como compartir el Evangelio de Cristo.
3. Muchos se avergüenzan de hablarle a otros de Cristo.
4. Muchos viven en pecado y por su estilo de vida no pueden hablarle a otros de Cristo.
5. Muchos quieren que otros hagan el trabajo por ellos (e.g. el predicador).
6. Muchos están mas envueltos en el entretenimiento que el evangelismo.
7. Muchos dicen que el evangelismo no es uno de sus talentos.
8. Muchos piensan que el evangelismo no es un asunto de vida o muerte.
9. Muchos han dejado que la indiferencia penetre sus corazones.

¿Cuáles son las razones que usted esta usando para no practicar el evangelismo?
Hermanos en Cristo, les animo en el nombre del Señor a que no ignoremos esta misión tan importante que El Señor nos ha encomendado. Recuerde que las almas son muy importantes,
y por consiguiente, debemos tomar muy en serio esta gran responsabilidad que hemos recibido.
Espero en Dios que usted no este usando estas rezones que he incluido en este articulo. Déjeme recordarle que estas rezones pueden hacer que nuestra salvación este en peligro. Cualquier razón que estemos usando para no practicar el evangelismo personal puede causar
que nuestra alma este en peligro

Como Vencer El Miedo

1. Pídale a Dios que le ayude a poder superar el miedo (Jn. 14:13).
2. Estudie la Biblia para que pueda estar preparado para estudiar con otros (1 P. 3:15). Si no estudia, no sabrá como hablar o que hablarle a otros.
3. Acompañe a aquellos que están envueltos en el evangelismo para que aprenda como estudiar con otros.
4. Llene su corazón de la Palabra de Dios (Sal. 119:11; 1 P. 2:2).
5. Tenga la plena confianza de que Dios esta con usted y que no esta solo (Mt. 28:20).
6. No podrá superar el miedo hasta que no lo haga por si solo.
7. Recuerde las bendiciones de llevar a cabo este trabajo (ayudar a otros a ir al cielo).
8. Ponga a un lado la pena y el miedo y concéntrese en que si puede hacerlo (deseche todo pensamiento negativo).
9. Recuerde que cuando usted hace esto esta imitando los pasos de Jesús, los apóstoles y los cristianos del primer siglo.
10. Recuerde las consecuencias de no hacer lo que es bueno (Stg. 4:17).
11. Aproveche seminarios como estos para aprender como ganar almas para Cristo.
12. Hable constantemente con el predicador para aprender buenos consejos y técnicas de cómo
hablarle a otros de Cristo. Cualquier cristiano que desee ir al cielo tratara hasta lo imposible de poner a un lado el miedo para que de esta manera ponga en practica el evangelismo Personal.
El Plan de Salvación Conforme A Las Escrituras

Reconocer que es pecador:

Romanos 3:9-10, 23; Eclesiastés 7:20
Escuchar el evangelio: Romanos 10:17; Hechos 8:12; 18:8
Creer en el evangelio y Cristo:Juan 3:16; 8:24; Marcos 16:16
Arrepentirse de sus pecados: Hechos 2:38; Lucas 13:3, 5; Hechos 3:19
Confesar a Cristo como el Hijo de Dios: Hechos 8:37; Romanos 10:9-10
Ser bautizado para el perdón de los pecados: Hechos 2:38; 22:16; 1 Pedro 3:21; Marcos 16:16
Ser fiel hasta la muerte: 1 Corintios 15:58; Filipenses 2:12-13; Apocalipsis 2:10

Este plan de salvación debe ser memorizado por todos los cristianos

QUE DIOS LES BENDIGA MIS HERMANOS EN CRISTO JESUS, DEL MUNDO ENTERO..........


EL QUE CREE EN MI Y TIENE SED, RIOS DE AGUA VIVA CORRERAN EN SU INTERIOR Jn 7:37,38


REVISE LA BIBLIA
Ríos de agua viva El agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna... De su interior correrán ríos de agua viva (Juan 4:14; 7:38.)En estos versículos, por medio de dos figuras se define una vida llena del Espíritu. Jesús le dijo a la mujer junto al pozo de Sicar: “El agua que yo le daré será una fuente.” Después, en el gran día de la fiesta, se dirigió a la multitud, diciendo: “El que cree en mí, de su interior correrán ríos de agua viva.” Notemos las dos expresiones: en él una fuente; de su interior... ríos.En nosotros, el Espíritu Santo es como una fuente, un pozo de agua siempre fresca y permanente.En el Antiguo Testamento se relata la historia de Agar, sierva de Abraham, quien anduvo errante por el desierto con su hijo, y llevando sólo un odre de agua. Cuando le faltó agua, la afligida madre dejó al muchacho debajo de un arbusto, pensando que moriría. Y el relato sigue diciendo que Dios le abrió los ojos a Agar y vio una fuente de agua.
Entonces llenó el odre de agua y dio de beber al muchacho (Génesis 21:9-21.)

En el Nuevo Testamento está la historia de la mujer junto al pozo de Sicar. Había venido a sacar agua para su uso diario. Pero allí encontró al Maestro y recibió el agua de vida, que sólo El puede dar. Así que dejó su cántaro y regresó llevando en su interior una fuente de agua viva (Juan 4:1-30.)Dios no quiere que seamos cristianos que solamente tengamos un odre o un cántaro de agua, sino que seamos pozos de agua, es decir, que seamos llenos del Espíritu.De nuestro interior, el Espíritu Santo fluye como inmenso río y no como arroyuelo. En el Antiguo Testamento, el Salmista dice: “Tomaré la copa de salvación, e invocaré el nombre de Jehová” (Salmos 116:13.) Pero una copa es pequeña y es poco lo que le puede caber. El profeta Isaías, por su parte, exclama: “Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación” (Isaías 12:3.) Desde luego un pozo tiene una gran ventaja sobre una pequeña copa, pero el pozo puede secarse. El Señor Jesús, sin embargo, en el Nuevo Testamento, declara que el agua que El ofrece será como una fuente que salte para vida eterna. ¡Profundas vertientes abastecen a una fuente y jamás se seca! Después el Maestro, asegura que el que en El cree, “de su interior correrán ríos de agua viva.” Hay pues, un maravilloso progreso, de una copa a un pozo, de allí a una fuente y, por último, de la fuente a un río. He aquí, inmensidad, la plenitud del don de Dios.Fijémonos, además, que no sólo es un río, sino ríos, ¡caudal divino! “Correrán de su interior,” dándonos a entender que la corriente es lozana, sin trabas, espontánea. A todo el que le recibe como Salvador y Señor, Cristo le otorga un don más que suficiente, que le brinda plena satisfacción. Y esa vida abundará en bendiciones hacia los demás.Fuente y ríos son dos términos que recalcan el alcance de la obra poderosa del Espíritu Santo, la medida en que se recibe y la medida en que se da. Se recibe el Espíritu ilimitadamente.
El apóstol Juan, en su Evangelio, nos dice que Dios dio a su Hijo su Espíritu sin medida (Juan 3:34.) Y nos atrevemos a creer que anhela dar su Espíritu sin limitación alguna, a todos sus hijos. Podemos inferirlo por la promesa que dio por medio de su profeta Joel: “Derramaré mi Espíritu sobre toda carne” (Joel 2:28). Derramar sugiere la idea de abundancia. Este es el significado de “la plenitud del Espíritu.” Hemos de poseer vida, pero algo más, vida abundante. Hemos de poseer gozo, plenitud de gozo. Hemos de recibir paz, paz que sobrepasa todo entendimiento. Nos corresponde llevar fruto espiritual, y más aún, abundante fruto. Todo esto muestra la diferencia entre aquel que va por la vida tropezando y cayendo y el que disfruta de vigor, paz, poder, todo copiosamente. Asimismo, la influencia del Espíritu Santo es sin medida: “ríos correrán.” La vida ya no es un depósito de escasos recursos, de los cuales, si se echa mano sin precaución, pronto se agotan, y por lo mismo es preciso tratar de conservarlos. La vida es ahora un cauce de recursos infinitos y nos hay peligro de que se acaben. Mientras más se da, más es su aumento; son inagotables los recursos. Hasta aquí se ha hecho hincapié en la necesidad de ser llenos del Espíritu Santo, pero es a la vez, de la misma significación que éste se derrame, y, ¿con qué objeto? Sugerimos dos razones por las cuales se hace necesario

1.FRESCURA. Un recipiente puede estar lleno de agua, pero si se deja por algún tiempo, llega a corromperse. Así también, una persona puede estar llena del Espíritu Santo, pero si no permite que se derrame una y otra vez, su vida cristiana se estancará. Para que se caracterice por su frescura, es preciso que se dé cabida al Espíritu Santo, pero que también fluya incesantemente. La vida del Espíritu tiene un ritmo, se recibe y se da. Si se recibe más de lo que se da, llega el momento en que se imposibilita la acción de ese divino Espíritu; y si se trata de dar más de lo que se recibe, habrá agotamiento espiritual. Hace varios años, después de que había terminado mis estudios de secundaria en la India, nuestra familia regresó a los Estados Unidos en su año de descanso. Durante el viaje tuvimos el privilegio de visitar la pequeña Palestina, donde nuestro Señor Jesús vivió y trabajó. Un día nos encaminamos al famoso mar de Galilea. Es un hermoso lago, de aguas cristalinas, rodeado de colinas y granjas junto a su playa. Muchos pescadores en sus lanchas se dedicaban a la tarea cotidiana y su pesca era abundante. Al día siguiente fuimos al mar Muerto y pasamos allí la tarde. Se conoce como mar Muerto, porque el agua es tan salada que no hay ni peces, ni plantas. Lo interesante de estas dos extensiones de agua, es que ambas se alimentan de las mismas corrientes que descienden del monte Hermón. Pero, ¿por qué uno de estos mares tiene mucha vida y al otro se le llama mar Muerto? El secreto es éste: Varios arroyuelos descienden del norte y desembocan en el mar de Galilea, y allá en el sur, sus aguas se vacían en el río Jordán. En otras palabras, el mar de Galilea recibe agua en abundancia y asimismo se derrama copiosamente. Por ello tiene vida. Pero el mar Muerto, no obstante que recibe corrientes caudalosas, allí se estancan, y, ¿con qué resultado? Está muerto. Si la vida espiritual no se caracteriza porque recibe y también da, esa vida con que el Espíritu Santo nos ha dotado, pronto se debilitará y morirá. Se necesita el ritmo de doble acción, para que haya plenitud y lozanía en la existencia cotidiana. La vida que posee la plenitud del Espíritu Santo no es inactiva, no es estéril; es vigorosa, dinámica, progresista.Hay tres frases en el Nuevo Testamento que se usan para describir la vida llena del Espíritu. Se hace constar que el día de Pentecostés, los apóstoles “fueron llenos” del Espíritu Santo (Hechos 2:4.) Desde ese momento, se dice de ellos que eran hombres “llenos del Espíritu Santo” (véase Hechos 6:5, 11:24.) Luego en Efesios 3:19, Pablo ora, pidiendo que los cristianos sean “Llenos de toda la plenitud de Dios.” “Fueron llenos,” llenos, “llenos de toda la plenitud.” La primera expresión indica una crisis; la segunda, un estado o condición; la tercera un proceso. Primeramente, ocurre una crisis. Debe haber un momento dado cuando la entrega personal es total, cuando aceptamos el don de Dios por fe y por primera vez somos llenos del Espíritu. Los discípulos estuvieron tres años con el Señor, pero no fueron llenos del Espíritu Santo hasta el día de Pentecostés. Después se disfruta de un estado o condición que se caracteriza por la permanencia del Espíritu Santo. Mientras que sea sumiso, obediente y fiel, el cristiano estará lleno del Espíritu Santo, pues ahora mora en él no como huésped que va de paso, sino como residente de permanencia fija, mientras que se le da acogida. Para que perdure este estado, hay un proceso que es menester seguir. Se hace indispensable recibir la plenitud del Espíritu una y otra vez, para que haya espiritualidad. De los apóstoles se nos dice, que después del Pentecostés “fueron llenos” en repetidas ocasiones (véase, por ejemplo, Hechos 4:31). Además, la vida espiritual crece más y más y es mayor la potencia del Espíritu de Cristo. Es así como se logra constante desarrollo en la vida cristiana.2.FRUTOEl ser llenos del Espíritu no es un fin en sí. Este tiene como finalidad derramarse en bendición sobre los demás. Suple mis propias necesidades y también me ayuda a satisfacer necesidades ajenas. La primera obra desarrolla el carácter cristiano; la segunda, conduce al creyente a la conquista de almas. La plenitud del Espíritu inunda el corazón para poder después inundar al mundo.Hay una parábola singular acerca de los ríos del mundo. Todos se dieron cita para decidir cuál era el más grande de todos. El río Nilo del África se jactaba, diciendo: “Soy el río más largo en todo el mundo, atravieso una distancia de casi 6,400 kilómetros. Soy, por lo tanto, el más grande.”El Amazonas de la América del Sur declaró orgullosamente: “Soy el río más extenso y más navegable en todo el mundo. Soy, por lo tanto, el más grande.”El Danubio en Europa dijo: “Hay más comercio y mayor cantidad de barcos que van y vienen por mis riberas, que en cualquier otro río. Soy, por lo tanto, el más grande.”El río Ganges de la India, para no quedar atrás, se vanagloriaba, asegurando que era el río más sagrado en todo el mundo. “Millares de personas” decía, “de todas partes del país vienen a sumergirse en mis inmaculadas aguas, para ser limpias de sus pecados. Soy, por lo tanto, el más grande.”Finalmente, un riachuelo sin nombre dijo, con humildad: “Yo no soy el más largo ni el más extenso; tampoco soy el más activo o el más sagrado. Pero una cosa hago. Cada año se desbordan mis aguas y fertilizan los campos cercanos; las siembras aumentan y se obtienen grandes cosechas. Los campesinos se alimentan y están satisfechos. Yo lo único que hago es permitir que mis aguas se derramen.”La opinión de la asamblea fue que aquel pequeño riachuelo era superior a todos los demás, porque permitía que sus aguas se desbordaran y beneficiaran a muchas gentes.Al poseer el Espíritu Santo, el propósito divino es que se derrame en servicio fructífero; pero asegurémonos que no es el yo que trata de imponerse, sino el Espíritu el que obra. Nada es tan trágico como los cristianos a medias, porque su labor es egoísta y hasta ofensiva. Pero cuando el creyente ha muerto a su yo y posee la plenitud del Espíritu Santo, su vida es eficaz y lleva mucho fruto.¿Cuál es ese fruto que se ve en una vida llena del Espíritu Santo? El apóstol Pablo claramente lo expresa en su Epístola a los Gálatas: “El fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza” (5:22, 23). Notemos que dice “fruto,” no “frutos.” El fruto del Espíritu es en realidad uno solo: el AMOR. Puede decirse que los demás que se mencionan son manifestaciones diversas del amor.¿Qué es el gozo? Es el amor feliz. ¿Qué es la paz? Es el amor en reposo. ¿Qué es la paciencia? Es el amor en espera. ¿Qué es la benignidad? Es el amor actuando. ¿Qué es la bondad? Es el amor en su forma de comportarse. ¿Qué es la fe? Es el amor que confíaCompárense las virtudes del amor, según aparecen en I Corintios 13:4-7, con las manifestaciones del amor, que se encuentran enumeradas en el pasaje de Gálatas mencionado y se verá que todo el fruto del Espíritu se halla involucrado en este amor sobrenatural. En verdad, ya sea directamente o por medio de un sinónimo, allí se menciona a cada uno.
El amor “es sufrido” —paciencia.El amor “es benigno” —benignidad.El amor “no tiene envidia” —bondad.El amor “no es jactancioso, no se envanece” —mansedumbre.El amor “no busca lo suyo, no se irrita” —templanza.El amor “se goza de la verdad” —gozo.El amor “todo lo cree, todo lo espera” —fe.

Si tenemos amor, poseemos todo el fruto del Espíritu; sin amor, nada somos. “El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” (Romanos 5:5).¿Cuáles son las condiciones para poseer una vida espiritual fructífera y abundante? En el gran día de la fiesta, Jesús las expuso con toda claridad, diciendo: “Si alguno tiene sed, venga a mí y beba” (Juan 7:37.)La sed es la primera condición. La plenitud del Espíritu Santo se le ofrece a quienes tienen sed espiritual, “Bienaventurados los que tienen sed de justicia, porque ellos serán saciados.” Al tener sed, se reconoce que es preciso satisfacer esa necesidad.Beber es la segunda condición. “Venga a mí y beba,” fue la invitación del Maestro, el Dador del agua de vida. ¿Qué implica beber? Es sencillamente un acto de fe. Todos los dones de Dios se reciben por fe. Por fe nos es dado el perdón y la vida eterna. Por fe recibimos el don del Espíritu y poder de lo alto.Hace algunos años me hallaba predicando en nuestro campamento anual, en los bosques del Sur de la India.Este campamento lo habían iniciado mi padre y el reverendo M. D. Ross en el año de 1923. Anualmente asisten de seis a siete mil cristianos y probandos de varias aldeas, y a la orilla de un arroyuelo a la sombra del bosque, alzan sus tiendas de campaña; arreglan sus utensilios de cocina, y asisten a los servicios evangelísticos tres veces al día. Para ellos es la gran festividad espiritual del año.Desde la inauguración de estas reuniones campestres, el tema al que se ha dado la atención principal ha sido la plenitud del Espíritu Santo. El versículo clave ha sido: “Quedaos vosotros hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.” El fin que se ha perseguido ha sido, que salgan de allí ministros y laicos investidos del poder del Espíritu y que los cristianos de la India se preparen para ser testigos fieles y se dediquen a la evangelización de su patria. A través de los años, la reunión campestre ha constituido la punta de lanza de un movimiento popular espontáneo, mediante el cual, alrededor de ciento sesenta mil almas han sido rescatadas para el reino de Dios y para su Iglesia.Una mañana, después que hube presentado el mensaje, uno de los sinceros creyentes se acercó y me dijo: “Ha hablado usted acerca de la plenitud del Espíritu Santo. Esta es mi mayor necesidad. ¿Quiere usted acompañarme al bosque y orar conmigo?” (Ha sido la costumbre en las reuniones, no invitar a los oyentes a pasar al frente, sino dirigirse a un sitio entre los árboles y entregarse a la oración). Así que tomé mi Biblia y lo acompañé.Después de caminar un poco, me dijo el campesino: “Aquí debajo de este frondoso árbol, arrodillémonos para orar.”“No aquí,” le contesté “vayamos un poco más adelante.”Seguimos caminando hasta que él volvió a decirme: “Señor, aquí está un hermoso árbol frutal con mucha sombra. Es un buen sitio para orar.”De nuevo, le contesté: “No aquí, vayamos un poco más adelante.”Repentinamente mi acompañante se detuvo, y tomándome de la mano me dijo con vehemencia: “Señor, no sé hasta dónde piense usted ir, pero yo no iré más lejos. ¡Aquí mismo oraré!”Sonreí entonces, y colocando las manos en sus hombros, le confesé lo siguiente: “Hermano, tenga paciencia. Sólo he estado probándolo para saber si realmente tiene usted sed del agua de vida, porque solamente los que tienen sed serán saciados. Ya me he convencido de que usted verdaderamente tiene sed. No es necesario seguir nuestra marcha. Aquí mismo usted puede recibir la plenitud del Espíritu.”Nos arrodillamos bajo la sombra de un árbol y ambos elevamos nuestras voces en oración al Señor. En esa mañana, el cristiano sediento se allegó a Jesús y tomó del agua de vida, hasta satisfacer su anhelo, inundándose su alma de gozo y alabanza. Y tengo la plena seguridad que su experiencia lo capacitó para conducir a su familia y a muchos otros seres sedientos, a la fuente que salta para vida eterna.¿Gozas tú de una experiencia semejante? ¿Anhelas sinceramente recibir la plenitud del Espíritu Santo? “Si alguno tiene sed” es la única condición. “Venga a mí y beba” es la amorosa invitación. Al recibirlo, el Espíritu será en ti una fuente y derramará de su plenitud, para bendición de tus semejantes.

jueves, 27 de noviembre de 2008

EN DEFENSA DEL PLAN DE SALVACION DE DIOS





REVISE LA BIBLIA

En Defensa del... Plan de Salvación de Dios

INTRODUCCIÓN

De todos los seres vivientes que moraban en el planeta Tierra, una criatura solitaria fue hecha “a la imagen de Dios”. En el sexto día de Su actividad creadora, Dios dijo: “Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó” (Génesis 1:26,27). Desde luego, la humanidad no fue creada a la imagen física de Dios, ya que Dios, como un ser espiritual, no tiene imagen física (Juan 4:24; Lucas 24:39; Mateo 16:17). Mejor dicho, la humanidad fue formada a la imagen espiritual, racional, emocional, y volitiva de Dios (Efesios 4:24; Juan 5:39,40; 7:17; Josué 24:15; Isaías 7:15). Los seres humanos son superiores a todas las demás criaturas. A ningún otro ser viviente le fue dado las facultades, habilidades, capacidades, el potencial, o la dignidad que Dios infundió en cada hombre y mujer. Efectivamente, la humanidad es la cúspide, el pináculo y el ápice de la creación de Dios.
En su posición superior como cenit del don creativo de Dios, la humanidad fue dotada con ciertas responsabilidades. Los hombres y mujeres debían sojuzgar la Tierra entera (Génesis 1:28). Ellos debían glorificar a Dios en su existencia diaria (Isaías 43:7). Y, ellos debían considerar como su “deber completo” el servir al Creador fielmente durante toda su estancia breve sobre esta Tierra (Eclesiastés 12:13).
EL DILEMA DEL HOMBRE: DESOBEDIENCIA Y MUERTE

Desafortunadamente, el primer hombre y mujer usaron sus poderes de voluntad—y la agencia moral libre basada sobre esos poderes—para rebelarse en contra de su Hacedor. El hombre finito hizo algunas elecciones terriblemente malas, y así entró el estado espiritual bíblicamente designado como “el pecado”. El Antiguo Testamento no solamente presenta en modo intenso la entrada del pecado en el mundo a través de Adán y Eva (Génesis 3), sino también alude a la ubicuidad del pecado entre la raza humana cuando dice: “Porque no hay hombre que no peque” (1 Reyes 8:46). A través de sus treinta y nueve libros, la Biblia trata una y otra vez la presencia del pecado en medio de la humanidad y sus consecuencias destructivas. Isaías recordó a la gente de Dios: “He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír” (59:1,2).
El Nuevo Testamento no es menos claro en esta evaluación. El apóstol Juan escribió: “Todo aquel que comete pecado, infringe también la ley; pues el pecado es infracción de la ley” (1 Juan 3:4). Por ende, el pecado es definido como el acto de violar la ley de Dios. De hecho, Pablo observó que “donde no hay ley, tampoco hay transgresión” (Romanos 4:15). No habiendo ley, no habría pecado. Pero Dios había instituido la ley divina. Y el hombre escogió libremente transgredir esa ley. Pablo reafirmó el concepto del Antiguo Testamento de la universalidad del pecado (1 Reyes 8:46) cuando declaró que “todos han pecado, y están destituidos de la gloria de Dios” (Romanos 3:23). Como resultado, el dilema del hombre llegó a ser más serio. El profeta Ezequiel se lamentó: “El alma que pecare, esa morirá” (18:20a). Una vez más, los escritores del Nuevo Testamento reafirmaron tal concepto. Pablo escribió: “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron” (Romanos 5:12). Luego él añadió que “la paga del pecado es muerte” (Romanos 6:23). Años más tarde, Santiago escribiría: “Sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte” (1:14,15).

Como un resultado del pecado de la humanidad, Dios colocó la maldición de la muerte sobre toda la raza humana. Aunque todo hombre y mujer debe morir físicamente como resultado del pecado de Adán y Eva, cada persona muere espiritualmente por su propio pecado. Cada persona es responsable por sí misma, espiritualmente hablando. La posición teológica que declara que nosotros heredamos la culpa del pecado de Adán y Eva es falsa. Nosotros no heredamos la culpa; nosotros heredamos las consecuencias. Y existe una gran diferencia entre las dos. Considere, como una ilustración de este punto, la familia en la cual un padre borracho llega tarde a la casa una noche, y en estupor alcohólico golpea a su esposa y a sus hijos. De seguro, su esposa y sus hijos sufren las consecuencias de su borrachera. ¡Pero sería absurdo sugerir que son culpables de esto! El mismo concepto se aplica en el campo espiritual. La gente muere físicamente a causa del pecado de Adán, pero mueren espiritualmente a causa de sus propias transgresiones de la ley de Dios. En Ezequiel 18:20, aludido anteriormente, el profeta continuó diciendo: “El hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él”.

EL REMEDIO DE DIOS PARA EL PECADO

A pesar de cuán desesperada, o cuán lamentable, haya llegado a ser la condición del hombre, Dios no tiene la obligación de proveer un medio de salvación para la criatura ingrata que tan altivamente se apartó de Él, de Su ley, Su amor, y Su misericordia. Las Escrituras hacen esto aparente cuando analizan el hecho que los ángeles pecaron (2 Pedro 2:4; Judas 6), y que Él “no socorrió a los ángeles, sino que socorrió a la descendencia de Abraham” (Hebreos 2:16). Las criaturas rebeldes que una vez habitaron los portales celestiales no fueron provistas con un plan de salvación. ¡Pero el hombre lo fue!
Entonces, ¿por qué Dios llegaría a tal extremo por la humanidad, cuando Su misericordia no fue incluso extendida a los ángeles? En cualquier respuesta que sea dada, no cabe duda que los esfuerzos del Creador en favor del hombre pecador son los resultados directos de puro amor. Como un Dios de amor (1 Juan 4:8), Él llevó a cabo una preocupación genuina, no por Sus propios deseos, sino en cambió por los de Su creación. Y nosotros debemos admitir que el amor de Jehová fue inmerecido. Dios nos ofreció salvación—nuestro “camino a casa”—aunque éramos impíos, pecadores, y enemigos (note el uso de esos términos en Romanos 5:6-10). El apóstol Juan se regocijó en el hecho de que: “En esto consiste el amor; no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros” (1 Juan 4:10).
El amor de Dios es universal, y Él no discrimina en ninguna forma (Juan 3:16). El quiere que todos los hombres sean salvos (1 Timoteo 2:4)—si ellos escogen serlo (Juan 5:40)—porque Él no quiere que nadie perezca (2 Pedro 3:9). Y, el amor de la deidad es inmutable. Lea Romanos 8:35-38 y ¡llénese de emoción! Solamente el cruel rechazo del hombre de Dios puede dejarlo fuera de la apropiación del ofrecimiento del cielo de misericordia y gracia.

El Plan de Dios En Preparación

¿Sabía Dios que el hombre se rebelaría, y estaría en necesidad de salvación del estado peligroso de su propia condición pecaminosa? Si, Él sabía. La inspiración habla de un plan divino establecido incluso “antes de la fundación del mundo” (Efesios 1:4; 1 Pedro 1:20). Después de la caída inicial de Adán y Eva, la humanidad se revolcó más profundamente en la maldad. Jehová envió un diluvio global para purgar la Tierra cuando la humanidad no regresó a Dios después de aproximadamente un siglo de predicación por el justo Noé (Génesis 6-8). Del fiel Noé, varias generaciones después, descendió el renombrado Abraham, y, a través de él, la nación hebrea finalmente fue establecida. De esa nación, el Mesías esperado—Dios encarnado—vendría.

Algunos cuatro siglos después de Abraham, el Señor, a través de Moisés, dio a los hebreos la revelación escrita conocida como la Ley de Moisés. Básicamente, este sistema de Ley tuvo tres propósitos. Primero, su propósito fue definir el pecado y agudizar la consciencia de Israel acerca de esto. En el Nuevo Testamento Pablo utiliza la expresión: la Ley hizo al “pecado extremadamente pecaminoso” (Romanos 7:7,13). Segundo, la Ley fue diseñada para mostrar al hombre que él no podía, por sus propios esfuerzos, salvarse a sí mismo. La ley demandaba obediencia perfecta, y ya que ningún hombre podía guardarla perfectamente, todos permanecieron en condenación (Gálatas 3:10,11). Por ende, la Ley subrayó la necesidad de un Salvador—Alguien que pudiera hacer por nosotros lo que no podíamos hacer por nosotros mismos. Tercero, en armonía con la necesidad, el Antiguo Testamento señalaba el camino hacia la venida del Mesías. Él sería Emanuel—“Dios con nosotros” (Mateo 1:23).

La humanidad estaba preparada para la venida del Mesías en varias maneras. Las teofanías fueron apariciones de Dios en varias formas (vea Génesis 16:7 et.seq.; 18:1 et.seq.; 22:11 et.seq., etc.). Un examen cuidadoso de los hechos guía a la conclusión que muchas de estas manifestaciones fueron del Cristo pre-encarnado. Adicionalmente, el Antiguo Testamento contiene tipos (anticipos pictóricos) del Mesías venidero. Por ejemplo: Cada sacrificio de sangre fue un símbolo del “Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” (Juan 1:29). Finalmente, existen más de 300 profecías que contienen detalles minuciosos del Príncipe de Paz venidero. Estas profecías nombraron la ciudad en la cual Él debía nacer, el propósito de Su estancia terrenal, e incluso la manera exacta de Su muerte. Jehová no dejó ninguna piedra sin mover al preparar al mundo para la venida de Quien salvaría a la humanidad.

El Plan de Dios En Acción
Uno de los atributos de Dios, como expresado en la Escritura, es que Él es un ser absolutamente santo (Apocalipsis 4:8; Isaías 6:3). Como tal, Él no puede ignorar el pecado. El profeta Habacuc escribió: “Muy limpio eres de ojos para ver el mal, ni puedes ver el agravio” (1:13). Además, otro de los atributos de Dios es que Él es justo. La rectitud y la justicia son la primera fundación de Su trono (Salmos 89:14). La verdad que surge del hecho de que Dios es tanto santo como justo es que ¡el pecado debe ser castigado!
Si Dios fuera un Creador frío y vengativo (como algunos incrédulos incorrectamente aseveran), Él simplemente pudo haber desterrado a la humanidad de Su divina presencia para siempre y ése hubiera sido el final del asunto. Pero la verdad es que, ¡Él no es esa clase de Dios! Nuestro Creador es amoroso (1 Juan 4:8) y “rico en misericordia” (Efesios 2:4). Por consiguiente, el problema llegaría a ser ¿cómo un Dios amoroso y misericordioso pudiera perdonar a la humanidad rebelde? Pablo trató esto en Romanos 3. ¿Cómo pudiera Dios ser justo, y además un justificador del hombre pecador? La respuesta: Él encontraría a alguien para sustituirnos—alguien para recibir Su retribución, y llevar nuestro castigo. Ese “alguien” sería Jesucristo, el Hijo de Dios. Él llegaría a ser un sacrificio sustituto, y personalmente pagaría el precio para la salvación de la humanidad. En uno de los más conmovedores tributos alguna vez escrito del Hijo de Dios, Isaías resumió la situación como ésta:
“Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros” (Isaías 53:5,6).

El intento de Jehová fue extender la gracia y misericordia libremente—a través de la vida y muerte redentora de Su Hijo (Romanos 3:24 et.seq.). Como un miembro de la divinidad, Cristo llevó en Sí mismo la forma de hombre. Él vino a la Tierra como un ser humano (Juan 1:1-4,14; 1 Timoteo 3:16), y por ende compartió nuestra naturaleza completa y experiencias de vida. Además Él fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado (Hebreos 4:15). Pero ¿qué tiene que ver esto con nosotros? Ya que Cristo fue probado (Isaías 28:16), y todavía hallado perfecto (2 Corintios 5:21, 1 Pedro 2:22), solamente Él podía satisfacer el requerimiento del cielo por justicia. Solamente Él podía servir como la “propiciación” (sacrificio expiatorio) por nuestros pecados. Exactamente como el cordero imperfecto que fue usado en el Antiguo Testamento podía ser la propiciación (temporal) por los pecados de los israelitas, así el “Cordero de Dios” (Juan 1:29) podía ser la propiciación (permanente) por los pecados de la humanidad. En el regalo de Cristo, la misericordia del Cielo fue extendida; en la muerte del Cordero de Dios, la justicia divina fue satisfecha; y, en la resurrección de Cristo, ¡el plan de Dios fue documentado y sellado para siempre!

LA APROPIACIÓN DE LA HUMANIDAD DEL REGALO DE DIOS DE LA SALVACIÓN

Tan maravilloso como es el regalo de Dios de la Salvación, hay algo que no es. No es incondicional. La humanidad tiene una parte en este proceso. Aunque el regalo de la salvación es gratuito (en el sentido de que el precio impuesto ya ha sido pagado por Cristo), Dios no forzará la salvación sobre alguien. Mejor dicho, cada hombre debe—por el ejercicio de su volición personal y agencia moral libre—hacer algo para aceptar el perdón que el cielo ofrece. ¿Qué es ese “algo”?
En Sus diversos tratos con la humanidad, Jehová ha enfatizado repetidamente que si el hombre quiere ser justificado, debe vivir “por fe” (Habacuc 2:4; Romanos 1:17; Gálatas 3:11; Hebreos 10:38). La salvación ha estado disponible a través de los siglos, condicionada sobre el conocimiento de antemano de la muerte expiatoria de Cristo en la Cruz del Calvario (Gálatas 4:4,5; Hebreos 9:15-17; 10:1 et.seq.). Hasta la fecha “vivir por fe” nunca denotó “entendimiento elevado” de ciertos factores. “Vivir por fe” denotaba obediencia activa.

La fe consiste en tres cosas: (1) un conocimiento de hechos históricos; (2) una buena voluntad para confiar en el Señor; y (3) una sumisión de todo corazón (obediencia) a la voluntad divina. Además la fe no siempre ha requerido—para todos los hombres, en toda circunstancia—las mismas cosas. Siempre ha requerido obediencia, pero la obediencia en sí misma no siempre ha demandado la misma reacción. Por ejemplo, en el trato más temprano de Dios con los hombres, la fe obediente requería que los hombres ofrecieran sacrificios de animales en el altar familiar (Génesis 4:4). Luego, Dios dio la Ley a Israel en el Monte Sinaí (Éxodo 20). Bajo esa ley, los sacrificios de animales continuaron, entre la observancia de ciertos días de fiestas y eventos. La fe aceptable, bajo cualquier ley que estuvo en vigor en su momento, demandó obediencia a la voluntad de Dios.
Las Escrituras enseñan que la “obediencia de fe” de una persona (Romanos 1:5; 16:26) está basada en la Palabra de Dios (Romanos 10:13), y que tanto la fe y la obediencia son demostradas por la acción. Hebreos 11 está dedicado a tal concepto. “Por fe” Abel ofreció. “Por fe” Noé preparó. “Por fe” Moisés rechazó. “Por fe” Abraham obedeció. Y así sucesivamente. Todo lector puede ser impresionado con los héroes de la fe en Hebreos 11:32-40, y la acción que ellos realizaron a causa de su fe. Santiago comentó que la fe, sin obediencia está muerta (2:26). Entonces, ¿qué implica esta “obediencia de fe” concerniente a la salvación? ¿Qué debe hacer una persona para ser salvo?

Varias preguntas necesitan ser hechas. Primero, ¿dónde se encuentra la salvación? Pablo dijo a Timoteo: “Por tanto, todo lo soporto por amor de los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna” (2 Timoteo 2:10, énfasis añadido). Segundo, ¿dónde se encuentran todas las bendiciones espirituales? Las bendiciones espirituales son halladas solamente “en Cristo”. Pablo escribió en Efesios 1:3: “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo” (énfasis añadido). Tercero, ¿cómo, entonces, alguien llega a estar “en Cristo”? ¿Cómo el pecador se deshace del pecado que condena su alma? ¿Qué “obediencia de fe” es requerida para obtener el regalo de la salvación que le pone “en Cristo”?

EL CAMINO A CASA: LA SALVACIÓN A TRAVÉS DE LA “OBEDIENCIA DE FE”

La única manera de encontrar el “camino a casa”, al cielo, es siguiendo las direcciones de Dios exactamente. Existen numerosas cosas que Dios ha mandado que una persona haga para imponer la “obediencia de fe” y por ende recibir el regalo gratuito de la salvación. Según la Palabra de Dios, para que una persona sea salva debe hacer lo siguiente. Primero, el pecador debe oír la Palabra de Dios (Romanos 10:17). Obviamente, una persona no puede seguir los mandamientos de Dios si no los ha oído, por ende, Dios ha mandado que la persona oiga lo que Él ha dicho concerniente a la salvación. Segundo, una persona que está perdida no puede ser salva si no cree lo que oye. Por consiguiente, Dios ha mandado que la creencia tenga lugar a continuación (Juan 3:16; Hechos 16:31). Tercero, alguien que está perdido no puede obtener salvación si no está dispuesto a arrepentirse de sus pecados y buscar el perdón (Lucas 13:3). Sin el arrepentimiento él continuará en pecado; por ende, Dios mandó al arrepentimiento. Cuarto, ya que Cristo es el fundamento de nuestra salvación, Dios mandó que el pecador penitente le confesara delante de los hombres como el Hijo de Dios (Romanos 10:9,10).

No obstante, esto no es todo lo que Dios mandó. La pregunta principal es: ¿Qué debe hacer uno para deshacerse del pecado? Los judíos que asesinaron a Cristo, y a quienes Pedro habló en el Día de Pentecostés cuando dio la bienvenida a la era cristiana, hicieron esa pregunta. El sermón de Pedro los había convencido de que necesitaban salvación. Ellos preguntaron: “Varones hermanos, ¿qué haremos?” (Hechos 2:37, énfasis añadido). Pedro les dijo: “Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados” (Hechos 2:38, énfasis añadido). Saulo, (conocido luego como Pablo) necesitaba una respuesta a la misma pregunta. Durante un viaje a Damasco para perseguir a los cristianos, Saulo fue cegado (Hechos 22). Él preguntó: “¿Qué haré Señor?” (Hechos 22:10, énfasis añadido). Ananías respondió a la pregunta de Saulo al mandarle: “Ahora, pues, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados” (Hechos 22:16, énfasis añadido).

Entonces, ¿cuál es la respuesta correcta concerniente a cómo uno se deshace del pecado? La solución bíblica es que la persona que ha oído el evangelio, ha creído en su mensaje, se ha arrepentido de sus pecados pasados, y ha confesado a Cristo como Señor debe entonces ser bautizado para el perdón de sus pecados. [La palabra castellana “bautizar” es una transliteración de la palabra griega baptizo, que quiere decir hundir, descender, zambullir debajo, o sumergir (Thayer, 1958, p. 94)]. Es el bautismo lo que pone a uno “en Cristo”.

¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados en su muerte? Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva (Romanos 6:3,4).
Pablo escribió: “Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos” (Gálatas 3:27, énfasis añadido). Luego, Pedro habló del bautismo como lo que salva (1 Pedro 3:21). Los escritores del Nuevo Testamento señalaron que es solamente cuando entramos en contacto con la sangre de Cristo que nuestros pecados pueden ser lavados (Efesios 1:7,8; Apocalipsis 5:9; Romanos 5:8,9; Hebreos 9:12-14). Cristo derramó Su sangre en la Cruz en Su muerte (Juan 19:31-34). ¿Dónde, y cómo llega uno a estar en contacto con la sangre de Cristo para obtener el perdón de los pecados que tal contacto asegura? Es solamente en el bautismo que ese contacto es realizado con la sangre y muerte de Cristo (Romanos 6:3-11). Además, la esperanza de nuestra resurrección (vivir con Él en el cielo) está enlazada con el bautismo. Pablo habló que “sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos” (Colosenses 2:12). Si no somos bautizados, permanecemos en pecado y no tenemos esperanza de resurrección que nos guía al cielo. El bautismo no es menos ni más importante que cualquier otro de los mandamientos de Dios concernientes a la salvación (vea Jackson, 1997). Pero es necesario, y uno no puede ser salvo sin éste. El bautismo es un mandamiento de Dios (Hechos 10:48), y es donde la remisión de los pecados ocurre (Hechos 2:38; Hechos 22:16; 1 Pedro 3:21).

Algunos enseñan que una persona es salva por “fe solamente”. Se le enseña a la gente simplemente a “orar y pedir a Jesús que entre a sus corazones” para que así puedan ser salvos de sus pecados. Esta enseñanza está en discordancia con la Biblia. Primero, las Escrituras enseñan que Dios no oye (i.e., oír para responder con perdón) la oración de cualquier pecador foráneo (Salmos 34:15,16; Proverbios 15:29; 28:9). En Juan 14:6 Cristo enseñó: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. El pecador foráneo se acerca a Dios por sí mismo, y no tiene abogado para así hacerlo en su nombre. Esa es una bendición espiritual reservada solamente para los cristianos (Efesios 1:3). Por ende, es infructífero para un pecador foráneo el orar a Dios para que “envíe a Jesús a su corazón”. Dios no oye (i.e., oír para responder a) tal requerimiento. Segundo, las Escrituras llanamente enseñan que el hombre no puede ser salvo por fe solamente. Santiago remarcó que un hombre puede ser justificado (i.e., salvo), pero “no por fe solamente” (2:24). Anteriormente escribió: “Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen y tiemblan” (2:19). No es suficiente creer simplemente. Aun los demonios creen, pero ellos no son salvos (2 Pedro 2:4). La fe sola es insuficiente para salvar. Además, la salvación nunca está condicionada a la oración, sino a la “obediencia de fe”. Saulo había orado seriamente. Pero sus pecados fueron removidos (“lavados”) solamente cuando obedeció el mandamiento de Dios de ser bautizado. La oración no podía lavar los pecados de Saulo, pero la sangre de Cristo podía—en el bautismo (Hebreos 9:22; Efesios 5:26).

CONCLUSIÓN

Dios desea genuinamente que todos sean salvos (Juan 3:16). Pero uno debe hacer exactamente lo que Dios mandó, en la manera exacta que Dios lo mandó. Cuando una persona oye, cree, se arrepiente, confiesa, y es bautizado para el perdón de los pecados, esa persona llega a ser un cristiano—nada más, y nada menos. Entonces Dios mismo añade a esa persona al cuerpo de Cristo—la iglesia. Aquellos que permanecen fieles hasta la muerte (Apocalipsis 2:10) tienen la promesa de una corona de vida y la eternidad en el cielo. Qué alegre pensamiento—vivir la “vida abundante” (Juan 10:10b) con una “paz que sobrepasa todo entendimiento” (Filipenses 4:7) aquí y ahora, y luego ser recompensado con un hogar en el cielo en el más allá (Juan 14:2,3).

martes, 25 de noviembre de 2008

UN VISTASO A LA VERDAD DE LA CREACIÒN

UN VISTAZO A LA VERDAD DE LA CREACION


REVISE LA BIBLIA

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Introducción:



Este resumen no intenta resolver todas las preguntas que pueda haber sobre la cuestión de orígenes. Más bien, es un vistazo rápido a la gran cantidad de información disponible en la actualidad que apoya la autoridad definitiva que la Biblia tiene. El factor decisivo para acercarse al tema es la persuasión del lector, pues si uno está buscando fundamentos para defender su fe en que Génesis contiene la verdad, encontrará respaldo, y tal vez será provocado a leer con mayor detenimiento los primeros nueve capítulos del libro inicial de la Palabra de Dios, y analizar a la par las evidencias científicas que dan testimonio de lo que ellos contienen. Si uno es un escéptico en cuanto a la Biblia se refiere, puede no cambiar de parecer, o puede ser incitado a examinar más minuciosamente sus creencias ante la evidencia abrumadora que señala claramente la existencia de un único y sabio Creador.
La Biblia es verdad , Por muchas razones podemos estar seguros de que la Biblia es lo que afirma ser: la Palabra de Dios, sin adulteraciones, plena de la revelación que Dios ha querido transmitir al hombre. Su contenido tiene como misión llevar al hombre a restablecer su relación íntima con Dios, a través de el reconocimiento de su calidad de pecador y la necesidad que tiene de un acceso al Creador. Este camino es únicamente a través de el Señor Jesucristo, el único y suficiente Salvador.La Biblia demuestra que es verdadera en cuanto a contenido e inspiración en varias maneras. Una de ellas es su misma composición. Fue escrita en un periodo de unos 1500 años, por cerca de 40 personas diferentes, de todo tipo de extracciones culturales, en tres idiomas, en tres continentes, abarcando una larga porción de la historia de la humanidad. Toda ella es coherente, y en ningún caso presenta contradicciones. Y su propia historia da testimonio de que ha sido protegida por la mano de Dios a través de los siglos.En todos sus relatos la Biblia es fidedigna, ya que en cuanto a exactitud histórica lo ha probado a través de los hallazgos arqueológicos que dan fe de que lo que ella narra efectivamente sucedió. También las profecías cumplidas con asombrosa precisión son una marca de autenticidad. Hay muchísimas profecías que se han cumplido en el pasado remoto, pero también hay aquellas que han visto su cumplimiento en tiempos recientes, como el nacimiento de la nación moderna de Israel.
También en todo lo que tiene que ver con ciencia la Biblia ha demostrado ser correcta. En tiempos pasados se ridiculizaban algunas nociones contenidas en ella, pero conforme el entendimiento de la ciencia ha avanzado, se ha ido comprobando que ningún punto es equivocado, trátese de el vacío, el sonido que producen las estrellas, o inclusive, del campo de la medicina. Las instrucciones de salubridad que Dios impartió a los israelitas siguen vigentes en la actualidad.Hay cualidades especiales en toda la constitución de la Biblia, a tal grado que ha sido reconocido su carácter sobrenatural por hombres de renombre a través de la historia. Muchos de los grandes personajes del pasado han tenido a la Biblia como guía de sus acciones, e inspiración de sus proezas.
La Biblia ha demostrado indudablemente que es el Libro de la revelación divina, ya que cumple con los siguientes requisitos:1. Ha sido transmitida con precisión desde el tiempo en que fue escrita.2. Es correcta al tratar de personajes y acontecimientos históricos. No confunde nombres, sucesos ni fechas, y la arqueología confirma cada vez más su exactitud.3. Está desprovista de absurdos científicos. No solamente cumple lo anterior, sino que lo sobrepasa. Tiene completa unidad y armonía, puesto que la historia que encierran las Escrituras es de principio a fin una sola: la redención del hombre. Cristo Jesús mismo lo expresó con la frase: "Tu palabra es verdad." (Juan 17:17).El relato de la creaciónLa Biblia contiene la verdad acerca del origen del universo y la vida, y nos lo presenta con sencillez y precisión:1. En el primer día, Dios separó la luz de las tinieblas (creación del universo, del día y la noche).2. En el segundo día, separó la expansión de las aguas (creación de la atmósfera).3. En el tercer día, separó lo seco de las aguas (creación de la tierra seca y los mares) y creó las plantas.4. En el cuarto día, hizo el sol, la luna y las estrellas (creación de los astros).5. En el quinto día, creó los peces y animales acuáticos, y todas las aves (primeros seres vivos).6. En el sexto día, hizo todos los animales terrestres y culminó su obra con la creación del ser humano, formado a su imagen y semejanza.7. Al séptimo día, Dios terminó su trabajo creador y descansó.Dios hizo todo cuanto existe a partir de la nada, pues es todopoderoso y autoexistente.
Sin embargo, a la gente no le gusta tener que responsabilizarse ante El de sus actos, así que inventaron:La teoría de la evoluciónEsta es una teoría sin fundamento científico que dice que los seres vivos evolucionaron a partir de formas primitivas que existieron en el muy distante pasado de nuestro planeta. En primer lugar, hay que aclarar que la idea de evolución que presentan los evolucionistas es la transformación de una especie simple en otra más compleja, a través de minúsculos cambios físicos y orgánicos que se van acumulando durante extensos periodos de tiempo. Esto es MACROEVOLUCION y jamás se ha demostrado que haya sucedido. Como ejemplo podemos citar el "progreso" de animal acuático a reptil a mamífero. En todo contexto, a esto se refiere la palabra "evolución". La adaptación al clima y al entorno que pueden lograr y de hecho realizan los seres vivos es algo diferente: no produce nuevas especies, sólo demuestra la gran versatilidad que tiene la creación original. Se llama MICROEVOLUCIÓN. Como ejemplo podemos ver las distintas razas de perro: no dejan de ser perros a pesar de las grandes diferencias en fisonomía (compara un Chihuahueño con un San Bernardo).La evolución presume de poder dar una explicación del origen del universo, apartada de un Ser Supremo y Creador. Propone el Big Bang, o Gran Explosión, en donde de la nada intemporal e inmaterial surgió todo lo que actualmente existe y postula una edad de 20 mil millones de años para el universo, y de 4500 millones de años para la tierra.
La evolución asevera que el hombre no es sino otro animal más, proveniente de antepasados simiescos. Su moralidad, sentimientos, raciocinio, lenguaje y demás atributos exclusivamente humanos aparecieron por azar. El hombre proviene de un caldo prebiológico y no va a ninguna parte. Es solamente un accidente más en este universo accidental.Sin embargo, son los mismos evolucionistas quienes nos revelan por qué se aferran tan testarudamente a una noción que es más un conjunto de fabricaciones ficticias que se creen por fe que algo asentado en la realidad observable. Apoyan la evolución porque de otra manera tendrían que admitir que existe un Dios omnipotente ante el cual tienen que rendir cuentas. Se liberan de las ataduras de la virtud y pueden dar rienda suelta a todos sus instintos debido a que están expresando su naturaleza animal, heredada de sus antepasados.
Pero la evolución es un cuento de hadas para adultos. Comienza igual que todos los cuentos infantiles: Hace mucho, mucho tiempo… expresado en millones de años para que parezca más creíble. Pero sigue tratándose de una rana convertida en príncipe.CreacionismoEsta es la contraparte de la evolución. Es la declaración de que Dios hizo el universo entero, y creó este planeta y todas las formas de vida que lo habitan en seis días literales, tal y como lo revela Génesis. La creación especial de Adán y Eva, y su subsecuente caída en el pecado, son la base para requerir de salvación para la humanidad-esta salvación es otorgada únicamente a través de Jesucristo.
La ciencia verdadera en ningún momento es enemiga de lo que la Biblia relata. Encontramos que las leyes físicas que rigen al universo fueron puestas por Dios para mantener en orden y funcionamiento a Su creación. Una gran cantidad de científicos notables realizaron sus investigaciones y lograron grandes descubrimientos gracias a que entendían que el principio operativo del universo es Dios. Muchos de estos hombres se opusieron fuertemente a la idea de la evolución, y la descartaron como una filosofía sin fundamento. Pero las condiciones sociales del siglo pasado fomentaron que fuera aceptada cada vez más por la sociedad, llegando a la época actual en que se enseña como un hecho científico comprobado. Sin embargo, ahora es cada vez más clara la evidencia que la regresa a su lugar de mera ideología.Tenemos leyes biológicas que contradicen fuertemente la evolución, como la de biogénesis, que expresa que ningún ser vivo puede provenir de materia inerte.
No obstante, los evolucionistas insisten en que de alguna manera, en algún momento, los organismos se formaron a partir de sustancias no vivas. Esto es imposible por poderosas razones: 1. La atmósfera primitiva hubiera impedido la aparición de la vida, con oxígeno o sin él.2. Las cantidades de materias primas necesarias para sintetizar la vida en un medio acuoso son tan grandes que jamás se hubieran logrado reunir.3. Las proteínas y el ácido desoxirribonucleico son demasiado complicados como para poder producirse al azar. 4. Los sistemas biológicos tienen que funcionar en conjunto, y hacer algo que sea de provecho para el organismo. Es una orquestación demasiado especializada.5. La célula viva requiere de que todo funcione al mismo tiempo, o nada funciona y no hay vida. La vida no se puede producir. Solamente se transmite de un ser vivo a otro.6. En último caso, la vida sólo puede crearse por un agente externo inteligente que dirija y controle los procesos.Si esto no trae a tu mente a Dios como único medio capaz de crear la vida, tal vez no seas muy vivo, o tengas una motivación oculta para no verlo. Toda la naturaleza expresa un diseño. Jamás encontraremos diseño sin un diseñador. Hay desde átomos en constante movimiento hasta grandes sistemas estelares que fueron puestos en marcha por Alguien que sabía perfectamente lo que hacía. Estadísticamente, es una precisión imposible de producir al azar.Las leyes de la herencia, las restricciones impuestas a las variaciones biológicas, la incapacidad de reproducción de los híbridos verdaderos, la falta de consistencia en la selección natural, la fatalidad de las mutaciones, la inexistencia de cambios graduales, el altruismo, los códigos genéticos y el lenguaje humano… todo esto da evidencia colosal en contra de un proceso ciego y sin dirección como la evolución.Por qué se detuvieron los procesos evolucionarios no tiene respuesta de parte de los evolucionistas.
Nosotros sí sabemos: no se detuvo nada porque nunca ha habido evolución en proceso en ningún momento de la historia del universo. Los argumentos con los que la evolución ha tratado de respaldar su caso son en su mayoría conceptos mal aplicados, ideas erróneas o información falseada. Cada una de sus propuestas se derrumba ante una inspección minuciosa.La complejidad de la vida desconcierta a los evolucionistas, y se encuentran con situaciones que no pueden explicar. Sus intentos por desentrañar estos misterios ocasionan más preguntas que respuestas, y al final balbucean: "De alguna manera se hizo, ¿o no?" o su favorita "Pero la vida existe..."Si la evolución se queda corta para explicar la vida en este planeta, no puede ni intentar proponer los orígenes del universo. Ni siquiera ofrece una explicación plausible de la formación de la luna, mucho menos de los planetas de nuestro sistema solar.
Ahora bien, las leyes naturales que gobiernan al universo, como las de termodinámica, colocan un obstáculo infranqueable en el camino de la evolución. El Big Bang es científicamente absurdo, pero lo sostienen porque no les queda otra opción más que Dios, y ésa la rechazan irrazonablemente. Mas cuando vemos lo que nos rodea con los ojos bien abiertos, nos damos cuenta de que hay múltiples pistas que señalan a una creación sabia y reciente, es decir, con una edad que no sobrepasa los 10,000 años. La cantidad de sales disueltas en los océanos, el campo magnético terrestre, la velocidad de erosión, y muchos otros rasgos de nuestro planeta e inclusive del espacio delatan la juventud del universo.Los evolucionistas han ido multiplicando por diez la edad de la tierra cada veinte años desde principios de siglo, por lo que ahora resulta ser 100,000 veces más antigua de lo que era en 1900. Claro, antes pensaban que la célula era tan compleja como una pelota de ping-pong, pero al ir descubriendo sus especializados componentes… lo único que se les ocurre es darle más tiempo al proceso. Pero ni una pelota de ping-pong se puede crear por sí misma, y aunque lo hiciera, no cobraría vida, ni con toda la eternidad a su disposición. El factor tiempo no es el elemento mágico que necesita la evolución para ser factible.Los fósiles se rehúsan a cooperar con la teoría de la evolución. Les acarrean severos problemas a los científicos que creen en ella.
Hay discontinuidades imposibles de llenar; las tumbas en masa hablan de un enterramiento rápido y violento, y no un depósito de milímetros de tierra cada década sobre cadáveres expuestos a la intemperie. La columna geológica que usan como referencia es imaginaria.Se han hallado fósiles inoportunos que echan por tierra el orden evolucionario fabricado con tanto cuidado. Sale a la luz el proceso de fijación de fechas al estilo evolucionista: el razonamiento en círculo, en que un fósil fecha a la roca, y la roca fecha al fósil. ¿Edad real? Desconocida. ¿Edad adivinada? Millones de años, claro está.Los métodos de fechamiento son un fraude, ninguno es absoluto. Todos se basan en presuposiciones incomprobables, y cuando marcan una fecha que está en desacuerdo con la idea evolucionaria arbitrariamente se adjudica otra. Los métodos radiométricos (potasio-argón y rubidio-estronio) dan fechas excesivamente antiguas, con márgenes de error de hasta 2 ó 3 millones de años. El método del carbono 14 no funciona tampoco. En primer lugar, solamente se puede utilizar en materiales orgánicos, y tiene un alcance máximo de 30,000 años. Sin embargo, el carbono 14 todavía no alcanza su punto de equilibrio, por lo que en realidad todas las fechas que se han obtenido con él no rebasan los 5000 años. Interesante, ¿no creen? Este método ha marcado fechas de hasta 3000 años de antigüedad en animales vivos. Imagínense lo que hará con restos más viejos. Por tanto, ninguna fecha proporcionada por los métodos comunes es fidedigna, y harán bien en dudar de cuanta cosa sea fechada como de hace cientos de miles de años, y peor aún, millones de años.Y llegamos al hombre, corona de la creación de Dios, que fue formado del polvo de la tierra y dotado de vida por el aliento divino mismo. ¡Y los evolucionistas se atreven a decir que vino de un mono! En qué poca estima se tienen ellos mismos, y cómo desprecian la singularidad humana. En varios lugares del planeta hay rastros de la ocupación del hombre que son anteriores a su supuesta aparición, lo cual nos conduce a dudar de los antepasados humanos. Al investigarlos concienzudamente, nos damos cuenta de que ningún supuesto prehumano es parte de nuestra línea genealógica. Varios de los hallazgos han sido fraudes, como el hombre de Piltdown, o el hombre de Java. Otros han sido vergonzosos errores de parte de los paleontólogos, como el hombre de Nebraska, que resultó ser un cerdo extinto, o el hombre de Pekín, que fue un mono destazado por humanos verdaderos. Otros, considerados primitivos por defectos genéticos o enfermedades, como el hombre de Neanderthal, ahora se clasifican como totalmente humanos. Luego llegamos a los simios extintos que los evolucionistas tercamente insisten en que son del linaje del hombre. No dejan de ser monos al estudiarlos bien, como los australopitecinos. Entonces hacen su aparición estelar restos como el cráneo 1470, que obliga a los paleontólogos a admitir "O nos deshacemos de éste cráneo, o desechamos nuestras teorías acerca del hombre primitivo", o el hueso KP 271, que se clasifica como simiesco, pero es netamente humano, y luego se disculpan diciendo: "Ubicarlo como de humano con esa antigüedad parecía absurdo, aunque sería lo correcto".En realidad, no se encuentra el eslabón perdido porque nunca ha existido.
Los cráneos de Calaveras, de Swanscombe, de Fontechevade, de Steinheim… todos anteceden a los pre-humanos, acabando de una vez por todas con la creencia evolucionaria de que el hombre proviene del mono. El hombre fue creado hombre por Dios, y eso es definitivo.El diluvioPara cerrar con broche de oro la demostración de que la Biblia es cierta 100%, seguimos con la realidad del diluvio universal. Así como el relato de la creación es cierto, la continuación también lo es.La historia humana concuerda con la narrativa que encontramos en Génesis. La prehistoria es un invento. Es lo que los evolucionistas quisieran hacernos creer para que nos traguemos el resto de su sarta de engaños. Pero las evidencias apuntan a que el ser humano surgió tan recientemente como lo declaran las Escrituras: unos 6000 años atrás. El hombre fue creado en el Edén, mas cayó en pecado al decidir gobernarse por sí mismo y desacatar las órdenes de Dios. A partir de allí la maldad moró en el corazón del hombre, siendo la primera muerte humana un asesinato. Y la degradación fue en aumento, sin freno, llegando al punto en que Dios decidió acabar con lo que había creado, pues por ser santo y perfecto, no puede tolerar el pecado. Pero había un varón justo, que merecía otra oportunidad. Dios optó por salvar a Noé con su familia y un muestrario de la vida animal. Le dio instrucciones para que construyera un arca en la cual pudieran estar a salvo del diluvio que iba a enviar sobre la tierra.
Noé obedeció, y entró al arca junto con su esposa, sus tres hijos y las esposas de éstos, más los animales que respiran aire. El arca era lo suficientemente grande (capacidad aproximada: 500 vagones de carga de ferrocarril) para contenerlos a todos ellos junto con alimento y los aperos necesarios para reiniciar la vida en la tierra después de la catástrofe.En el día determinado, Dios cerró la puerta del arca y abrió las fuentes del grande abismo y las cataratas de los cielos. El mejor modelo que he encontrado para explicar cómo se pudo haber llevado esto a cabo es que en ese momento fue expulsada con gran violencia a través de una ruptura en la superficie terrestre una enorme cantidad de agua subterránea que se encontraba almacenada desde la creación del mundo.
Esto produjo un surtidor tan alto, que el agua subió hasta la estratosfera, de donde cayó de regreso a la tierra atomizada en forma de lluvias torrenciales y granizo (que instantáneamente enterró, sofocó y congeló a los mamuts y rinocerontes lanudos que se han encontrado en Siberia y Alaska). Llovió de esta manera durante 40 días y 40 noches.El agua siguió brotando a caudales por esta grieta, hasta cubrir todo el planeta, que en ese entonces tenía una fisonomía muy diferente a la actual (había un solo continente, los mares eran pequeños y no muy profundos y las montañas eran mucho más bajas de lo que son ahora). Llegó el punto en que el agua que inundaba la tierra mitigó el chorro, mas el agua continuó saliendo por 150 días.Al aliviarse la presión sobre el substrato de roca basáltica, se alzó una cresta en medio de lo que ahora son los océanos (la Cresta o Dorsal Medio-Océanica que se puede ver en los mapas de relieve del mundo). Esto causó que los continentes se deslizaran cuesta abajo desde la Cresta, lubricados con agua, en direcciones opuestas, hasta quedar en las posiciones que actualmente ocupan. Poco a poco, el agua que había quedado sobre los continentes fue drenándose hacia las cuencas oceánicas, hasta que la forma de la tierra quedó casi como ahora la conocemos. Cuando por fin la tierra se secó lo suficiente, Noé y su familia desembarcaron, junto con los animales, encontrándose en un lugar absolutamente diferente al mundo que ellos conocían anteriormente. De esas ocho personas volvió a surgir toda la humanidad, y de esos animales que sobrevivieron en el arca se pobló nuevamente el planeta.
El nivel del mar permaneció sumamente bajo todavía durante un tiempo largo, para facilitar la migración humana y animal a todos los rincones del mundo. Posteriormente llegó el momento en que el nivel del océano subió lo suficiente para separar permanentemente las regiones del mundo, con las zonas climáticas y de fauna localizada que ahora conocemos. Pero hubo muchas especies que no llegamos a conocer, como los:DinosauriosEn primer lugar, estas criaturas existieron en verdad. La Biblia contiene unas de las mejores descripciones de dinosaurios, y de hecho, les dedica más palabras que a cualquier otro animal contenido en sus páginas. El behemoth descrito en Job 40:15-18 solamente puede ser un gigantesco dinosaurio herbívoro, tal vez un braquiosaurio, mientras que el leviatán descrito en el 41:1-34 era mayor y más temible que un plesiosaurio. Estas bestias fueron definitivamente contemporáneas del hombre, pues fueron creadas por Dios junto con el resto de los animales.
El escritor de Job debe haberlas conocido de primera mano. Vivieron en el Edén, junto con Adán, y posteriormente abordaron el arca con Noé. Sin embargo, en el mundo postdiluviano algunos no hallaron comida suficiente, otros tuvieron que cambiar sus hábitos alimenticios, otros fueron presa del hombre, otros no se pudieron adaptar al nuevo entorno, y poco a poco, se fueron acabando, de tal manera que se consideran extintos en la actualidad. CONCLUSIÓNPero la desaparición de los dinosaurios recalca el estado corrompido en que ahora se encuentra la tierra. Las especies animales están extinguiéndose a razones alarmantes, el hombre ha llegado a un estado de degeneración igual o peor al que suscitó el diluvio, y nos preguntamos: ¿qué diferencia hace si creo en la evolución o en la creación?Déjame decirte que toda en el mundo. No puedes creer en la evolución si crees en el Creador, pues la premisa de la evolución es que no hay Dios, que no hubo creación, y que todo cuanto existe es producto del capricho del azar.¿Pero no se puede conciliar la evolución con la creación, es decir, pensar que Dios haya empleado a la evolución para crear a los animales? No, la respuesta es un rotundo no. No puedes creer en la mal llamada "evolución teísta", ni en ninguna otra idea que trate de mezclar la creación con la evolución. La evolución en todas sus formas es una mentira, es un engaño de Satanás para mermar el efecto que Dios pueda tener en la vida del hombre. No se puede conciliar la verdad con la mentira. Hay blanco y negro, sin escala de grises intermedia.Si tú crees en Dios, en la Biblia, y en Jesucristo como tu Salvador, no puedes creer en la evolución. Y te voy a dar la más poderosa razón para ello:Si el mundo provino de una gran explosión, si se formó de la nada por casualidad, y la vida llegó a ser por procesos aleatorios, entonces la muerte era un ingrediente necesario y ha sido parte natural del universo desde su nacimiento.
Por tanto, la muerte no es consecuencia del pecado, y el pecado no es pecado. ¿De qué nos iba a salvar Cristo, entonces? ¿Qué razón habría para que Dios ofreciera a Su propio Hijo como rescate por nuestra vida? Si tan sólo somos un pedazo de materia que existe por un momento y luego se desvanece, ¿para qué se nos da la oportunidad de la vida eterna? Si todo lo que somos es material, no tenemos un alma ni un espíritu que vivan por siempre. ¿Cuál es el fin de la fe? ¿Y para qué nos dio Dios la Biblia? ¿No sería un franco desperdicio?Es sorprendente que un ateo pueda entender esto mejor que muchos cristianos.
En las palabras de G. Richard Bozarth, en su escrito "El significado de la evolución" para la revista El Ateo Americano:"El cristianismo ha pelado, todavía pelea, y peleará contra la ciencia hasta el fin extremo respecto a la evolución, porque la evolución destruye absoluta y finalmente la misma razón por la que supuestamente se hizo necesaria la vida terrenal de Jesús. Destruye a Adán y Eva y el pecado original, y entre los escombros encontrarás los lastimeros restos del hijo de dios [sic]. Quita el significado de su muerte. Si Jesús no fue el redentor que murió por nuestros pecados, y esto es lo que significa la evolución, entonces ¡el cristianismo es nada!"Y el efecto que tiene el creer en la evolución es devastador. Roba al hombre de un sentido de propósito, de un destino. Le quita la esperanza, y le arroja al vacío irremediablemente. La evolución consiente la existencia del asesinato, del racismo, del homosexualismo, de la drogadicción y de peores cosas condenadas claramente por Dios. Al fin y al cabo, los animales así se comportan, ¿por qué nosotros no podemos? Todo lo malo es aceptable ante la evolución: es natural. Si venimos de Adán, creado por Dios, los valores son absolutos y Dios pone las reglas. Si venimos del mono, evolucionado por casualidad, los valores son relativos y el hombre pone las reglas. Según el mundo, esta segunda opción te libera.En 1962, en Estados Unidos se dejó de orar y de enseñar los diez mandamientos en las escuelas, y la evolución se comenzó a inculcar como un hecho científico probado. Las estadísticas muestran qué ocasionó este alejamiento de la verdad de Dios: el rendimiento escolar bajó de un promedio de 97 a un promedio de 89 del cual no se ha podido recuperar. La cantidad de adolescentes entre 15 y 19 años de edad que padecen enfermedades venéreas aumentó 226%. La cantidad de embarazos en niñas de 10 a 14 años de edad aumentó 553%. La cantidad de parejas que viven en concubinato (unión libre) aumentó 536%. La cantidad de divorcios se disparó 117%. Y los crímenes violentos subieron 794%. Cifras que crecieron alarmantemente en menos de 40 años. En comparación, el crecimiento total de la población aumentó tan sólo un 25% en ese mismo tiempo (1962-1990). Sin embargo, en agosto de este año (1999), el estado de Kansas dejó de enseñar la evolución en las escuelas porque no es un hecho científico.Desgraciadamente, el pensamiento evolucionista se ha infiltrado en todos los ámbitos, y de ti y de mí depende que la gente conozca la verdad. Como cristianos bíblicos no tenemos más opción que estar al tanto de este asunto, y aprovechar cada oportunidad que se nos presente para dar a conocer la verdad de la Creación. Es de suma importancia que les enseñemos a nuestros hijos que la evolución es una mentira, y que estemos armados contra ella y sus secuelas. ¡Preparémonos para pelear en la victoria de Jesús! Seamos cristianos instruidos, y tengamos a la Biblia como autoridad definitiva.
Los conceptos científicos pasan, y cambian, pero la Verdad Eterna de Dios permanece, y al final, siempre es la que tiene la razón.Si nunca habías pensado en el asunto, o si no eres cristiano siquiera, tal vez quieras cuestionar tu posición. Para acercarte al Creador y regresar al diseño perfecto que Él realizó en la creación, necesitas reconocer que eres pecador por el simple hecho de ser humano y descendiente de Adán. Eso te separa irremediablemente de Dios, a menos que aceptes como tu Señor y Salvador a Su Hijo Unigénito Jesucristo, que se hizo hombre, murió y resucitó para salvarte por toda la eternidad. Puedes hacerlo diciéndole ahora mismo: "Señor Jesús, en estos momentos confieso que soy un pecador y que necesito de ti. Ven a mi corazón y hazme nacer de nuevo, deseo esa vida eterna que sólo en ti puedo tener. Conviértete en el Señor de mi vida." No volverás a ser igual. Te invito a que consideres esta magnífica opción que el Dios omnipotente pone a tu alcance, pues al retornar a tu Padre Celestial, te conviertes en una persona con una nueva identidad y un destino brillante. ¡Que Dios te bendiga!

EVIDENCIAS DE UN MUNDO JOVEN por el Dr. D. Russell Humphreys ©1999

A continuación expongo 12 fenómenos naturales que están en claro conflicto con la teoría evolucionista que dice que el universo tiene miles de millones de años. Los números que aparecen en letras negritas (a menudo se trata de millones de años) son el periodo máximo de años en que pudo llevarse a cabo cada proceso, es decir, se trata de cifras extremas hipotéticas y no de años reales. Los números en letras cursivas se refieren a los años que, según la teoría evolucionista, debió haber durado cada proceso.
El problema es que los tiempos máximos supuestos siempre son mucho menores que los requeridos por la teoría evolucionista, mientras que la edad terrestre propuesta por la Biblia (6,000 a 10,000 años) se ajusta cómodamente a los tiempos máximos. Por ello, los doce puntos siguientes son una evidencia sólida contra la escala cronológica evolucionista y, en cambio, sustentan la escala cronológica bíblica. Existen muchas otras evidencias que favorecen la idea de un mundo joven, pero escogí éstas porque me parecen las más claras y breves.
Algunos puntos de la lista podrían, en algún momento, ser compatibles con un universo viejo, pero para ello deberíamos partir de presupuestos improbables y no confirmados; otros puntos sólo resultan lógicos considerando un universo joven. La lista comienza con fenómenos astronómicos, luego aborda sucesos terrestres y termina con hechos cotidianos. 1. Las galaxias giran sobre sí mismas demasiado rápido.Las estrellas de nuestra galaxia, la Vía Láctea, giran alrededor del centro galáctico a distintas velocidades: las de la parte interior van más rápido que las del exterior. Se sabe que las velocidades de rotación estelar son tan altas que si nuestra galaxia contara con más de algunos cientos de millones de años, no conservaría la forma espiral que tiene hoy: se habría convertido en un disco estelar amorfo1. Sin embargo, se supone que nuestra galaxia tiene al menos 10 mil millones de años.
Los evolucionistas llaman a esta falta de congruencia (detectada hace unos 50 años), “el dilema del enroscamiento de los brazos espirales”. Hasta ahora han elaborado muchas teorías tratando de explicarlo, pero todas han desaparecido tras gozar de una popularidad fugaz. Este mismo “dilema del enroscamiento” también se aplica a otras galaxias. En las últimas décadas, se ha tratado de explicar el problema usando una teoría compleja llamada “de las ondas de densidad”1. Pero dicha teoría tiene problemas conceptuales y, para funcionar bien, debe ser aplicada arbitraria aunque minuciosamente. Además, en años recientes ha sido muy cuestionada desde que el Telescopio Espacial Hubble descubrió una estructura espiral muy detallada en el centro de la Galaxia “Remolino” M512. 2. Los cometas se desintegran con excesiva rapidez.Según la Teoría de la Evolución, los cometas tienen la misma edad que el Sistema Solar, es decir, unos 5 mil millones de años. Pero cada vez que un cometa pasa en órbita cerca del Sol, pierde tanta materia que no podría durar más de unos 100,000 años. Además, muchos cometas tienen sólo 10,000 años3. Quienes apoyan la teoría evolucionista justifican este problema diciendo que: 1.- los cometas provienen de la “Nube de Oort” (nunca observada, de forma esférica), que está mucho más allá de la órbita de Plutón; 2.- intercambios gravitacionales poco probables entre cometas y estrellas que rara vez pasan cerca de éstos, a menudo los arrojan hacia el interior del Sistema Solar; 3.- otros intercambios gravitacionales improbables con algunos planetas disminuyen la velocidad de esos cometas, lo que explica que podamos observar cientos de ellos4. Hasta ahora, ninguna de estas presuposiciones ha sido sustentada por observaciones ni por cálculos reales. Recientemente se ha hablado mucho del “Cinturón de Kuiper”, un disco que está al mismo nivel del Sistema Solar, un poco hacia afuera de la órbita de Plutón: se supone que en él se generan muchos cometas. Incluso si ahí existieran cuerpos helados, eso no solucionaría el problema, pues de acuerdo con la teoría evolucionista, el Cinturón de Kuiper se agotaría rápidamente si la Nube de Oort no lo alimentara. 3. No hay suficiente lodo en el suelo oceánico.El agua y los vientos erosionan cada año cerca de 25 mil millones de toneladas de tierra y piedra de los continentes, depositándolas en el mar5. Este material se acumula en forma de lodo sobre el suelo marino, formado por dura roca basáltica de origen volcánico. La profundidad promedio de lodo en el océano, incluyendo las plataformas continentales, es menor a los 400 metros6.

El lodo del suelo marino desaparece principalmente a causa de lo que puede llamarse depresión o desplazamiento de placas tectónicas. Es decir, el suelo oceánico se desliza lentamente (tan sólo unos centímetros al año) por debajo de los continentes: en este movimiento arrastra consigo sedimentos. Según la literatura científica evolucionista, actualmente este movimiento de placas terrestres solamente remueve mil millones de toneladas al año6. Hasta donde sabemos, las otras 24 mil millones de toneladas se acumulan. Considerando ese ritmo de acumulación, la simple erosión habría depositado la cantidad de sedimento presente hoy en el suelo marino en menos de 12 millones de años. Sin embargo, de acuerdo con la teoría evolucionista, la erosión y el desplazamiento de placas tectónicas han ocurrido desde que se formaron los océanos: supuestamente hace unos 3 mil millones de años. Si esta cifra fuera correcta, actualmente los océanos estarían saturados de lodo cuya profundidad alcanzaría docenas de kilómetros. Una explicación alternativa para resolver este problema es la ofrecida por la ciencia creacionista. Ésta afirma que la erosión provocada en los continentes por las aguas del diluvio del Génesis depositó la cantidad actual de lodo en un corto periodo de tiempo, hace aproximadamente 5 mil años. 4. No hay suficiente sodio en el mar.Cada año, ríos7 y otras fuentes 9 vierten más de 450 millones de toneladas de sodio al mar: sólo el 27% de ese sodio deja el mar en el curso de un año8,9. Hasta donde se sabe, el sodio sobrante se acumula en el océano. Suponiendo que cuando el mar se formó no hubiera contenido sodio, a la tasa actual de acumulación y dilución se hubiera tardado menos de 42 millones de años en juntar la cantidad que tiene hoy9. Esta cifra es mucho menor a la edad del mar según los evolucionistas, quienes afirman que tiene 3 mil millones de años. La respuesta más común para resolver esta discrepancia es que, en el pasado, el ingreso de sodio al mar debió haber sido menor y la dilución, mayor que la actual. Con todo, los cálculos más optimistas apenas sugieren una edad máxima de 62 millones de años9, lo que de cualquier manera no resuelve el problema. Y si se calcula10 la edad del mar tomando en cuenta otros elementos del agua marina, se concluye que los océanos son incluso más jóvenes. 5. El campo magnético de la Tierra se descompone demasiado rápido.

La energía total acumulada en el campo magnético de la Tierra ha disminuido de manera constante según un factor de 2.7 durante los últimos mil años11. Algunas teorías evolucionistas explican este rápido deterioro y justifican el hecho de que la Tierra haya podido mantener su campo magnético durante miles de millones de años, pero dichas teorías son excesivamente complicadas e inadecuadas. En contraste, los científicos creacionistas ofrecen una explicación mucho más convincente. Es sencilla, se basa en la física pura y explica varias características del campo magnético, por ejemplo, su creación, sus rápidos retrocesos durante el Diluvio Universal, los aumentos y disminuciones de intensidad en su superficie hasta tiempos de Cristo y el constante descenso que ha experimentado desde entonces12. Esta teoría concuerda con la información paleomagnética e histórica y con los datos que se tienen actualmente13. El resultado principal que ella arroja es que la energía total del campo magnético (no la intensidad en su superficie) siempre ha disminuido al menos tan rápidamente como ahora. A ese ritmo, el campo no podría tener más de 10,000 años14 de antigüedad.

6. Muchos estratos están demasiado plegados.En muchas zonas montañosas, estratos de miles de centímetros de grosor están doblados y plegados en un ángulo muy cerrado, como el de un pasador u horquilla de cabello. La escala geológica convencional de tiempo dice que estas formaciones fueron enterradas a gran profundidad y solidificadas unos cientos de millones de años antes de que se plegaran. Sin embargo, al plegarse no se agrietaron y además, las resquebrajaduras que presentan son tan pequeñas que sólo pueden explicarse si la formación completa hubiera estado todavía húmeda y sin solidificar cuando sucedió el plegamiento. Esto implica que los estratos se doblaron menos de algunos miles de años después de la sedimentación15. 7. La arenisca inyectada señala “eras” geológicas más cortas.Existe fuerte evidencia geológica16 para afirmar que la arenisca cámbrica de la cadena montañosa Sawatch –supuestamente formada hace 500 millones de años–, en la falla Paso de Ute, al oeste de Colorado Springs, EU, se hallaba sin solidificar cuando emergió a la superficie. Esto sucedió al elevarse las Montañas Rocosas, se supone que hace unos 70 millones de años.
Es muy poco probable que la arenisca no se solidificara durante los 430 millones de años que en teoría estuvo enterrada. En cambio, es altamente posible que ambos eventos geológicos hayan sucedido con una diferencia de menos de algunos cientos de años, lo que acortaría de manera importante la escala de tiempo de las eras geológicas. 8. Según la radiactividad de los fósiles, las “eras” geológicas duraron unos pocos años.Los halos o aureolas de radiactividad son anillos de color que se forman alrededor de muestras microscópicas de minerales radiactivos en cristales de roca: constituyen evidencia fósil de la desintegración de la radiactividad17. Las aureolas emitidas por Polonio-210 “aplastado” indican que las formaciones del Jurásico, Triásico y Eoceno en la meseta de Colorado, EU, fueron depositadas con meses de diferencia entre una y otra, no con cientos de millones de años como indica la escala cronológica convencional18. Asimismo, las aureolas “huérfanas” de Polonio-218 no presentan evidencia de los elementos que las generaron por lo que, o indican una creación instantánea o señalan cambios drásticos en el ritmo de desintegración de la radiactividad19,20.9. Helio en lugares equivocados.Todas las familias formadas naturalmente por elementos radiactivos producen helio cuando se desintegran. Si tal desintegración hubiera tardado miles de millones de años, como afirman los evolucionistas, mucho helio habría sido liberado a la atmósfera terrestre. El ritmo con que la atmósfera libera helio al espacio es calculable y de cantidad pequeña. Aun tomando en cuenta esa liberación de helio, actualmente la atmósfera sólo contiene 0.05% de la cantidad de helio que debería haber acumulado durante 5 mil millones de años21. Esto significa que la atmósfera es mucho más joven de lo que afirma la teoría evolucionista.

Un estudio publicado en la Revista de Investigación Geofísica (Journal of Geophysical Research) muestra que el helio producido por desintegración radiactiva en rocas profundas y calientes no ha tenido tiempo de liberarse. Aunque se supone que las rocas tienen más de mil millones de años, su alta concentración de helio sugiere que su edad real es de apenas algunos miles de años22. 10. No hay suficientes esqueletos de la Edad de Piedra.Los antropólogos evolucionistas dicen que la Edad de Piedra duró al menos 100,000 años. En ella, la población mundial de hombres de Neanderthal y Cro-magnon se mantuvo más o menos constante, entre uno y diez millones de personas. Durante todo ese tiempo, los hombres enterraron a sus muertos acompañándolos de utensilios diversos23: según esto, al menos 4 mil millones de cadáveres habrían sido enterrados24. Si la escala cronológica evolucionista estuviera en lo correcto, los huesos enterrados deberían durar bastante más de 100,000 años. Es decir, hoy deberíamos contar con muchos esqueletos de unos 4 mil millones de años y, por supuesto, con los utensilios enterrados a su lado. Sin embargo, sólo se ha podido encontrar algunos miles de esqueletos. Esto implica que la Edad de Piedra fue mucho más corta de lo que afirman los evolucionistas, de hecho, que en algunos lugares duró apenas unos cientos de años.11.
La agricultura es muy reciente.Las teorías evolucionistas afirman que los hombres de la Edad de Piedra fueron cazadores y recolectores durante 100,000 años antes de descubrir la agricultura (hace menos de 10,000 años)23. No obstante, la evidencia arqueológica muestra que los hombres de la Edad de Piedra eran tan inteligentes como nosotros. Es muy poco probable que entre los 4 mil millones de personas mencionadas en el apartado 10, ninguna hubiera descubierto que las plantas crecen de las semillas. Es más creíble decir, si acaso, que los hombres vivieron sin agricultura durante un periodo menor a algunos cientos de años después del diluvio24. 12. La Historia es demasiado breve.Según los científicos evolucionistas, el hombre de la Edad de Piedra vivió unos 100,000 años sin dejar ningún testimonio escrito y apenas hace 4,000 ó 5,000 años comenzó a escribir.
El hombre prehistórico construyó monumentos megalíticos, hizo hermosas pinturas rupestres en las paredes de las cuevas y registró las fases lunares25. ¿Por qué iba a esperar miles de siglos antes de aplicar estos conocimientos para asentar la historia? La escala cronológica bíblica resulta mucho más aceptable24. Notas bibiliográficas1 Scheffler, H. y H. Elsasser, Physics of the Galaxy and Interstellar Matter, Berlín, Springer-Verlag: 1987, pp. 352-353, 401-413. 2 D. Zaritsky et al., Nature (22 de julio, 1993); Sky & Telescope (diciembre 1993), p. 10. 3 Steidl, P. F., “Planets, comets and asteroids”, en G. Mulfinger (editor), Design and Origins in Astronomy, Creation Research Society Books: 1983, pp. 73-106 (5093 Williamsport Dr., Norcross, GA 30092). 4 Whipple, F. L., “Background of modern comet theory”, Nature 263 (2 de septiembre, 1976) 15. 5 Gordeyev, V. V. et al., “The average chemical composition of suspensions in the world’s rivers and the supply of sediments to the ocean by streams”, Dockl. Akad. Nauk. SSSR 238 (1980) 150. 6 Hay, W. W., et al, “Mass/age distribution and composition of sediments on the ocean floor and the global rate of subduction”, Journal of Geophysical Research, 93 núm. B12 (10 de diciembre, 1988) 14,933-14,940.7 Maybeck, M., “Concentrations des eaux fluviales en elements majeurs et apports en solution aux oceans”, Rev. de Geol. Dyn. Geogr. Phys. 21 (1979) 215.8 Sayles, F. L. y P. C. Mangelsdorf, “Cation-exchange characteristics of Amazon River suspended sediment and its reaction with seawater”, Geochimica et Cosmochimica Acta 41 (1979) 767. 9 Austin, S. A. y D. R. Humphreys, “The sea’s missing salt: a dilemma for evolutionists”, Proc. 2nd Internat. Conf. on Creationism, Vol. II, Creation Science Fellowship: 1991 (en prensa). Consultar la dirección en la nota 12. 10 Austin, S. A., “Evolution: the oceans say no!”, ICR Impact, núm. 8 (octubre 1973), Institute for Creation Research. Consultar la dirección en la nota 2. 11 Merril, R. T. y M. W. McElhinney, The Earth’s Magnetic Field, Londres, Academic Press: 1983, pp. 101-106. 12 Humphreys, D. R., “Reversals of the earth’s magnetic field during the Genesis flood”, Proc. 1st Internat. Conf. on Creationism (agosto 1986, Pittsburgh) Vol. II, Creation Science Fellowship:1987, pp. 113-126 (362 Ashland Ave., Pittsburgh, PA 15228). 13 Coe, R. S., M. Prévot, y P. Camps, “New evidence for extraordinarily change of the geomagnetic field during a reversal”, Nature 374 (20 de abril, 1995), pp. 687-92. 14 Humphreys, D. R., “Physical mechanism for reversals of the earth’s magnetic field during the flood”, Proc. 2nd Intern. Conf. on Creationism, Vol. II, Creation Science Fellowship: 1991 (en prensa). Ver nota 12. 15 Austin, S. A. y J. D. Morris, “Tight folds and clastic dikes as evidence for rapid deposition and deformation of two very thick stratigraphic sequences”, Proc. 1st Internat. Conf. on Creationism, Vol. II, Creation Science Fellowship: 1986, pp. 3-15 Consultar dirección en la nota 12. 16 Ibid, pp. 11-12. 17 Gentry, R. V., “Radioactive halos”, Annual Review of Nuclear Science 23 (1973) 347-362. 18 Gentry, R. V. et al, “Radiohalos in coalified wood: new evidence relating to time of uranium introduction and coalification”, Science 194 (15 de octubre, 1976) 315-318. 19 Gentry, R. V. “Radiohalos in a Radiochronological and cosmological perspective”, Science 184 (5 de abril, 1974) 62-66. 20 Gentry, R. V., Creation’s Tiny Mystery, Earth Science Associates: 1986, pp. 23-37, 51-59, 61-62 (P.O. Box 12067, Knoxville, TN 37912-0067). 21 Vardiman, L., The Age of the Earth’s Atmosphere: a study of the helium flux through the atmosphere, Institute for Creation Research: 1990 (P.O. Box 2667, El Cajon, CA, 92021). 22 Gentry, R. V. et al, “Differential helium retention in zircons: implications for nuclear waste management”, Geophys. Res. Lett. 9 (octubre 1982) 1129-1130. Véase también la nota 20, pp. 169-170. 23 Deevey, E. S., “The human population “, Scientific American 203 (septiembre 1960) 194-204.24 Marshak, A., “Exploring the mind of Ice Age man”, Nat. Geog. 147 (enero 1975) 64-89. 25 Dritt, J. O., “Man’s earliest beginnings: discrepancies in the evolutionary timetable”, Proc. 2nd Internat. Conf. on Creat., Vol. I, Creation Science Fellowship: 1990, pp. 73-78. Consultar la dirección en la nota 12.Creation Science Fellowship of New Mexico, Inc. P.O. Box 10550, Albuquerque, NM 87184, EUA Traducción: JSE “Evidencias de un mundo joven” está siendo usado con permiso de Creation Research Society (CRS) [Sociedad de Investigación de la Creación] http://www.creationresearch.org/, con copyright de 1999. Todos los derechos de este material están reservados. El material no ha de distribuirse a otros sitios en la web para extraer la información, ni publicarse en otros medios, o reflejarse a otros sitios sin el permiso por escrito de CRS. Se otorga permiso de fotocopiar localmente (fotocopiar en grandes cantidades está bien), pero no con fines de lucro; y esta obra no puede ser combinada con otras obras ni editada de ninguna forma sin el permiso expreso por escrito de CRS. Así que... por favor copia y usa este artículo por el Dr. Humphreys (de acuerdo a lo anterior) para propósitos locales, no de lucro, y educativos (es decir, fotocopiar para tus clases o seminarios está bien) pero no lo re-transmitas ni combines ni publiques ni redistribuyas de ninguna otra forma. ¡Esperamos que este artículo sea de interés y beneficio para ti!El Dr. Humphreys recientemente se jubiló como Físico en Jefe de los Laboratorios Nacionales de Sandia (EEUU). Actualmente es Profesor Asociado de Física para el Institute for Creation Research [Instituto para la Investigación de la Creación], también es miembro de la mesa directiva de la Creation Research Society, y es una figura líder en la Asociación de Ciencia de la Creación de Alburquerque.

TODAS LAS RAZAS HUMANAS PROVIENE DE ADAN

Efectivamente, no hay ser humano que provenga de otro lugar. Absolutamente toda la humanidad es descendiente directa de Adán, y posteriormente, de Noé. Por eso mismo, es un error garrafal pensar en términos de “razas” humanas. Existe una sola raza, la humana. Los diferentes colores y demás características físicas que nos distinguen a unos de otros en la Biblia no son llamados “razas”, se llaman “naciones”.
Este concepto es el actual término “etnia”, que distingue a un pueblo que comparte ciertas características físicas y costumbres, lengua y tradiciones, aunque no pueda ser definido dentro de un límite geográfico bien definido. La gran diversidad de rasgos físicos son simplemente la expresión de la variedad genética que Dios incluyó dentro de los géneros originalmente creados. Cuando Dios envió el diluvio, todos los seres humanos murieron, a excepción de Noé y su familia, por lo que todos los que actualmente poblamos la Tierra descendemos de Noé. Nuestra línea podrá provenir de Sem, Cam o Jafet, pero es definitivo que Noé es nuestro antepasado, por lo que podemos considerar a todo ser humano nuestro pariente lejano o cercano. Cada hombre que existe en este planeta (y aún los que viven en las estaciones espaciales) comparten genes con nosotros, y en algún momento de los 4000 años anteriores, sus antepasados y los nuestros fueron las mismas personas. Es claro que hay distintos colores de piel, que se generalizan en blanco, negro y amarillo… pero las variaciones dentro de cada uno son casi infinitas. ¿Cómo se dieron? Hay tres factores principales que pudieron haber causado las distinciones mayores. Uno de ellos es la herencia y la relación con el ambiente. Las leyes de la herencia filtran ciertos genes de las generaciones sucesivas, produciendo retoños con características ligeramente diferentes y menor variabilidad genética.
Hemos oído hablar de los genes dominantes y los recesivos. Estos últimos se van perdiendo poco a poco, y cada vez es menos probable que los rasgos que ellos controlan se manifiesten. Las preferencias culturales son otro factor, expresándose en gustos (al seleccionar a la pareja) y desagrados (los prejuicios). La crianza cultural de una persona determina en gran manera el tipo de persona que uno cree que es bello, y eso tiene mucho que ver con quién es elegido como pareja. Si lo han notado, las parejas tienden a tener rasgos similares. Por lo general escogemos a un esposo o esposa que se parezca a nosotros mismos. Los humanos también tienen prejuicios, que han sido causantes de guerras, genocidios, segregación forzada y aislamiento voluntario. Adolfo Hitler tenía una hostilidad irracional hacia los judíos y una marcada preferencia por la supuesta raza aria (que no existió en realidad). Hitler fue un ferviente creyente en que solamente deberían sobrevivir los más aptos (según su propio criterio), en este caso, la gente blanca, de ojos azules, rubia y alta. El era de cabello oscuro y de baja estatura. Inclusive en su pasado hubo sangre judía … pero eso no le impidió fomentar la predominancia de los arios y la destrucción de los judíos. Su programa para eliminarlos fue el detestable resultado de creer en las teorías de Darwin. Y hay muchos otros pueblos que no se mezclan “racialmente” con sus vecinos, lo cual los aísla genéticamente y ha generado la separación geográfica de pueblos con diferentes aspectos físicos. Las poblaciones pequeñas y asiladas tienden a casarse entre sí, y ese manejo repetitivo de los mismos genes elimina toda la diversidad que había en un principio en ese lugar. Esto es lo que sucede con los pobladores de islas o de valles apartados.
Es a través de estos tres mecanismos que con el transcurso del tiempo obtenemos características genéticas únicas en ciertos lugares. Y si entendemos esto, podemos darnos cuenta de que los genes que Adán y Eva tenían fueron tan ricos que contuvieron todos los colores de piel, de ojos, de cabello y demás rasgos que ahora existen. De hecho, conforme se va estudiando más profundamente el código genético humano, los científicos se han hallado con dos sorpresas: la primera es que la diferencia entre cualesquier par de seres humanos (rasgos físicos) comprende tan sólo el 0.2%, del cual sólo el 6% está relacionado con lo que se pueden considerar “características raciales” (esto es 0.012% del total).
La segunda es que comienzan a deducir que todos los seres humanos descienden de un antepasado común debido a la evidencia presentada por el cromosoma Y. Esto apunta a que el relato de Génesis acerca de la creación es verdadero. Cuando Dios creó al hombre, lo creó de tal manera que tuviera una riqueza genética extraordinaria que pudiera legar a sus descendientes. Pero además de eso, los genes de Adán y Eva no solamente eran muy ricos en información distinta para ofrecer toda una gama de posibilidades a sus hijos y generaciones sucesivas, sino que también eran perfectos, es decir, en ellos no había deterioro ni mutaciones.
Ha sido como consecuencia de la desobediencia del hombre que la herencia genética ha ido decayendo y reduciéndose. Noé todavía debe haber heredado un rico abastecimiento de genes, que transmitió a cada uno de sus hijos. Estos tres hombres, a su vez, combinaron su herencia con la de sus esposas (que debieron tener un potencial genético tan amplio como el de los varones), y he allí el origen de toda la gran diversidad de colores y formas que actualmente tenemos los seres humanos. No es difícil para mí creer esto, pues he visto dentro de mi propia familia la expresión de una multitud de rasgos diferentes que provienen de las mismas dos personas: mis abuelos maternos. Mi abuelo era alto, rubio, de ojos azules. Mi abuela es alta, también, pero morena, de cabello y ojos oscuros. Tuvieron catorce hijos: nueve varones y cinco mujeres. Entre ellos, hay un gigante de 2.05 metros, y un “chaparro” de 1.75. Hay una morena bajita de ojos verdes, y una blanca alta de cabello negro y ojos casi negros. De hecho, las cinco mujeres son totalmente diferentes entre sí. Todas tienen distinto color de cabello que va desde el rubio hasta el negro. Hay ojos cafés (desde un tono casi miel hasta prácticamente negro), verdes, grises… Entre los hombres los hay de rostro afilado y de cara redonda, de nariz recta, o larga o chata… Entre ellos hay un leve aire de familia, pero uno no se da cuenta al primer vistazo de que son hermanos, especialmente si los que se están comparando son los más disímiles entre sí. Y ni me pregunten de la siguiente generación, a la cual pertenecemos mis 50 primos y yo… ¡Y qué tal la generación de nuestros hijos! Mis dos hijas son bastante diferentes entre sí, también: La mayor es de complexión muy delgada, blanca de cabello oscuro.
La menor es de complexión más robusta, y morenita con cabello color miel. Una de seguro va a ser muy alta, la otra tal vez no rebase 1.60 metros. ¡Qué sin fin de posibilidades hay en cada pareja al juntarse sus genes! Así que no importa cómo nos veamos en el exterior, somos iguales en el interior: todos criaturas especiales de Dios, hermanos de todos los demás seres humanos. Si el mundo entendiera esto, cuántas guerras se evitarían… pero la evolución enseña que unos son más aptos, más bellos, más inteligentes y por tanto más merecedores de lo bueno que otros. Con esto se perpetúa el odio irracional hacia aquellos cuyo aspecto difiere del propio. La contribución de Darwin ha sido en detrimento de la paz y armonía entre la humanidad, ya que provee un razonamiento convincente para justificar el racismo. ¡Qué lastima que la mayoría de la gente prefiera creerle a él que a Dios!.

LA CLONACIÓN: UN PUNTO DE VISTA ÉTICO CRISTIANO


Estamos en una época de adelantos tecnológicos vertiginosos que provocan confusión respecto a su validez ética al aplicarlos a los seres humanos. Mayor todavía es la interrogante respecto a su validez ante los principios bíblicos y la voluntad de Dios. En especial, la clonación suscita este tipo de inquietud.
Los seres vivos están formados por células, y cada una de éstas tiene una serie de instrucciones genéticas completas llamadas el "genoma". Desde la primera división a partir de la concepción, el núcleo de cada célula formada en las divisiones sucesivas contiene esta información genética completa.
Dentro del desarrollo embriónico, las células se especializan, es decir, van diferenciándose para ser unas células cutáneas, otras células nerviosas, otras neuronas, y así todos los tipos de células que componen un ser viviente. Cada una ejecuta diferentes funciones, basándose en una parte determinada del código genético. Este código genético es el que le dice a cada célula qué tipo de célula es, qué le toca hacer, cómo y cuándo hacerlo... es el control maestro para la vida. Las partes del código genético que no son utilizadas por una célula especializada no desaparecen, sino que se almacenan en estado latente.
En la clonación, la información latente u oculta del núcleo de una célula especializada se activa para conseguir a partir de ella un espécimen idéntico: un clon. Esto es, un ser (planta, animal o humano), derivado de otro organismo, teniendo componentes hereditarios idénticos. Muchas veces los clones provienen de la misma célula (como en el caso de los gemelos idénticos o monozigóticos), o se originan de la célula de otro individuo.

EL PROCESO

Cuando se forma un embrión, las células están rodeadas por una capa que se llama la "zona pelúcida". Si ésta se disuelve y las células se separan antes de que inicie la especialización celular, las células individuales pueden ser clonadas, ya que contienen toda la información genética para producir un organismo completo.
Un método es que a éstas células se les quite el núcleo con su ADN y se fusione por medio de una corriente eléctrica con un óvulo que se ha vaciado de estos elementos. En el caso de Dolly, la borrega clonada por científicos escoceses, el embrión resultante se implantó en el útero de la "mamá" que parió a Dolly, donde se desarrolló como cualquier otro embrión lo hubiera hecho.
Es necesario tener una célula "madre" (del organismo del que se va a hacer la copia), un óvulo vacío (de una donadora), y una matriz preparada para recibir el embrión y llevarlo a término.
Otro método es que a cada célula ya separada se le cubra con una "zona pelúcida" artificial para que se forme un embrión que pueda ser implantado y que se geste enteramente, también en un útero.

CLONACION NATURAL

La clonación no un invento reciente, ni humano. Dios dispuso que algunos seres se reprodujeran de esta manera, como las papas que salen de los tubérculos de las papas de la cosecha anterior, y saben igual de buenas. Las fresas también se propagan por guías, que son clones de la planta progenitora, y su fruta es igual en color y sabor. Otras plantas se propagan por codos. Algunos animales también se reproducen asexualmente, como ciertos pulgones, abejas, hormigas, crustáceos y lagartijas. Esta forma de reproducción requiere solamente de mitosis, que es la división celular en la que una célula replica su ADN (ácido deoxirribonucléico: el archivo de la información genética y control de todas las actividades celulares) y produce una copia idéntica de sí misma.
En la reproducción sexual también existe la clonación natural: los gemelos idénticos son clones, ya que el óvulo fertilizado (zigoto) se divide en dos, y cada una de estas células se desarrolla por separado (por mitosis-que es el tipo especial de división celular empleado por la reproducción sexual). Son dos personas con un juego de genes totalmente idéntico. Sin embargo, aunque las dos personas se ven iguales y se parecen mucho inclusive en sus características internas como habilidades innatas, cada una tiene su propia personalidad y su propia alma.



INVESTIGACIÓN CON CELULAS MADRE

Al poder controlar el desarrollo a partir de células "madre" se podría hacer crecer casi cualquier tipo de tejido, lo cual tendría aplicaciones tremendas en el campo de la medicina. Para un diabético se podría formar un páncreas saludable que sí generara insulina. No habría problema de rechazo con un trasplante en el cual el órgano sustituto se hubiera generado a partir del original. No habría necesidad de suprimir la respuesta inmunológica del organismo porque el tejido sería totalmente compatible.
Sin embargo, habría que tener cuidado con la fuente de estas células. La manera más fácil de obtenerlas es a partir de embriones, y éstas tienen un potencial más amplio. Pero implican la destrucción del embrión. No obstante, se pueden obtener de tejidos de adultos (sangre, médula ósea, hígado), o del cordón umbilical. Si este es el caso, no hay problema moral en seguir trabajando en la investigación. Pero un embrión humano no debe ser usado con ningún propósito. No se deben usar células embrionarias primitivas.



CONSIDERACIONES ETICAS DE LA CLONACION HUMANA

La clonación de animales y plantas, especialmente cuando se trata de hacerle un bien a la naturaleza, es aplicable y no viola ningún principio ético. La manipulación genética con propósitos de erradicar enfermedades o aliviar el hambre es otra manera en que esto se realiza sin infringir los lineamientos morales.
Pero la línea no se cruza respecto al hombre. La clonación de un ser humano es éticamente inadmisible. La Biblia marca una clara distinción entre los demás seres vivientes y el ser humano. Desde el momento de la creación, el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios: ningún otro miembro del reino animal fue hecho así (Gn 1:27). Nuestra vida no es solamente vida física (bios), como la de los animales, sino también vida espiritual (zoe) (Lc 16:19-31; Fil 1:23). Además, aunque al hombre se le dio dominio sobre los animales, no se le dio ese mismo dominio sobre otros humanos (Gn 1:26). Cuando al hombre se le permite alimentarse de animales, se le prohíbe tomar la vida de otro hombre (Gn 9:2-5; Ex 20:13). El único que tiene potestad sobre la vida del hombre es Dios.

Al trabajar con la clonación, necesariamente muchos embriones son sacrificados. Para producir a Dolly se hicieron múltiples intentos, 98 % de los cuales fracasaron. Una cantidad de los embriones formados no se implanta, otra cantidad muere durante la gestación o poco después de nacer. Cuando se trata de embriones humanos, el costo es demasiado alto, pues cada embrión es una persona. Eliminar embriones humanos en la experimentación es homicidio, pues se trata de seres humanos propiamente dichos, con naturaleza biológica y moral.
Los clones que sobreviven a las etapas iniciales normalmente son defectuosos. Padecen de cardiopatías o inmunodeficiencia, insuficiencias en distintos sistemas y tienden a morir prematuramente. Dolly es una borrega enferma. La clonación está muy lejos de ser una técnica perfecta, y tal vez nunca lo llegue a ser. Según Ian Wilmut, el "creador" de Dolly, sería "criminalmente irresponsable" experimentar con personas<1>. Cada intento implicaría la muerte de cientos de embriones.
Además, la manera que Dios estableció para que la humanidad se multiplicara fue a través de la familia: un padre y una madre. Por tanto, la clonación artificial de un ser humano completo sería un atentado en contra de un principio bíblicos establecido, pues no se requiere ni de padre ni de madre, menos de una familia. La procreación sólo debe de darse dentro del marco de matrimonio.

OTROS PROBLEMAS ETICOS

Si se quisiera clonar a alguien con el propósito de conseguir un órgano para trasplante, también se estaría cruzando la línea ética, pues se trataría de un bebé creado para el bien de otro, lo cual devalúa la vida humana. ¡Sería considerarla un producto industrial más!
Si se quisiera reproducir una persona que ya murió, por razones sentimentales, se crearían más problemas éticos respecto a parentescos; también menoscabaría el valor de la vida humana, y por último pero no menos importante, habría que tener en cuenta que aunque se pudiera copiar biológicamente a una persona, jamás se podría reproducir el conjunto de su características personales internas, como el intelecto, la compasión, el temperamento, la voluntad y demás atributos de la personalidad. El producto distaría mucho de satisfacer las expectativas (que tenderían a ser mucho más altas que las que se tendrían para un bebé concebido naturalmente--que es bien recibido como venga), porque no se comportaría ni reaccionaría igual al original, y por tanto, habría el riesgo de que fuera rechazado. Y si se originó en un laboratorio, ¿no sería fácil eliminarlo al dejar de desearlo? Tendríamos seres humanos "desechables". En el momento que no te guste, tíralo a la basura y consigue uno nuevo.
No se puede desarrollar tecnología que implique la muerte de embriones humanos ni la devaluación de la vida humana. Este es un caso claro en que el bien no sobrepasa al mal. Los beneficios que se pudieran conseguir no son dignos de considerarse, pues implican el asesinato o la desvalorización de la vida humana. ¿Es moral lograr algo por medios inmorales?
La clonación de plantas y animales es correcta bajo circunstancias que conduzcan al beneficio de la humanidad, pero la clonación de humanos no es permisible bajo consideraciones bíblicas. Atenta en contra de principios claros, como el carácter sagrado de la vida humana y el propósito de la procreación (que sólo debe darse en el contexto familiar). Moralmente no es aceptable.